Voz de mi hija. Crying.

Voz de mi hija, Llorando.

sábado, 3 de agosto de 2024

Escribo recordándote


Mar espejo del cielo,
de aguas danzando entre olas,
de brillante espuma de nácar,
de gotas haciendo cabriolas.

Hoy voy a cubrirte de rosas,
cambiaré tu azul por ámbar,
tu arena por perlas,
 y oiré cantar a las caracolas.

Me rodea un perfume a flores
como todos los tres de agosto,
un aroma cálido de sales
perfilan tu blanco rostro.

Esta vez serán las gaviotas,
quienes levantando el vuelo,
llevarán hasta ti, madre,
un beso con sabor a violetas.

A mi madre, de Airblue.


No sé si es posible encontrar un mundo sin oscuridad, sin malos entendidos, ni prejuicios, donde la mentira no existe, ni la desconfianza, un lugar donde en el aire flota la música al compás de los latidos del corazón, donde puedes ver el alma de cada ser, traslúcida y etérea. Cierras los ojos y atraviesas distancias, todo está cerca, muy cerca y no existe el miedo. Un lugar donde te sientes protegido por la misma vida y cuando miras arriba, la luz de las estrellas ilumina el rostro más triste y es que son tan hermosas que parecen flores de terciopelo .