Voz de mi hija.

miércoles, 26 de marzo de 2025

Marzo lluvioso




Pues sí, ya volvemos a estar en primavera, aunque de momento no lo parezca con este rosario de borrascas que hemos tenido. Bendita agua cuando se habla de sequía y maldita cuando rebosa ríos y pantanos sin tregua y sin piedad, arrasando todo lo que encuentra a su paso.

Añoro las primaveras de mi juventud. Las mañanas frescas con olor a hierba joven, que empezaba a crecer salpicada del rojo carmesí de las amapolas. Las tardes de música y lectura, mientras los demás dormían siestas "digestivas". Y las noches eran lo mejor, acurrucada en la hamaca disfrutando del silencio, de un silencio envidiable, sin tráfico, sin ruidos invadiendo y evitando la tranquilidad. A veces solo el sonido de una armónica te hacía levitar, era mi hermano, hace ya demasiado tiempo que sus notas flotan y sus breves susurros salen de mi corazón.

Y es que el silencio no tiene rostro, la soledad lo dibuja recordando. Ni tiene color, la soledad lo pinta de negro y lo cubre de sombras.

El silencio no tiene pentagramas, la soledad es toda una sinfonía de lamentos. El silencio tiene un cuerpo frágil, la soledad lo acaricia noche a noche. El silencio canta en verano y primavera, la soledad llora en otoño y en invierno. Todo sucede en un plácido éxtasis.

Las noches más bellas son aquellas en las que la luna se viste de dorado y adorna su cabello con conchas de nácar, regalo del mar.
 Su imagen rodeada de estrellas crea el escenario perfecto para que la pluma del poeta exprese su sentir, para que yo misma quede en trance por el resplandor que me produce la luz, que ha sido siempre una fuente de inspiración.

La luna cae y se corporiza. Viene a mis pies y me la llevo. Unidas
 las  dos vamos sin fronteras. Miro de reojo y es verde y amarilla como la piel de un plátano. Mientras el mundo intenta liberarse de la miseria de las guerras, yo camino sorteando charcos de sangre, de la escarlata sangre de la luna.

viernes, 31 de enero de 2025

Una fecha importante.

Que quién soy ?
Una mujer que lleva diecinueve años con este blog.
Que gracias a los foros de Terra encontré un pequeño lugar donde poder escribir mis vivencias y mi historia y en el que un alma generosa me ayudó a introducirme en Blogger, porque no tenía ni idea.
La muerte de mis padres con cinco meses de diferencia, dejó sin consuelo y totalmente destrozado mi corazón. Sentí una gran soledad impuesta que es la peor.
Qué cuántos años tengo?
Los suficientes para haber vivido una vida plena, llena de tropezones, obstáculos y durezas, lo bastante fuertes para llegar a conocer la profesión más humana del mundo y dedicar mi vida a ella.
Para tener una adolescencia preciosa siempre acompañada de la música y el arte de la pintura.
Para haber sido fiel al compañero que elegí por casualidad y que sigue a mi lado para lo bueno y para lo malo.
Que ha podido conocer la maravilla de la maternidad cuando tenía veintitrés años.
Que se enternece ante cualquier maravilla de la naturaleza, que se enamora de las flores, del color de las nubes, del brillo de una gota de lluvia y de un atardecer frente al mar.
Que se aflige ante el dolor, la enfermedad, el maltrato y unas lágrimas incontrolables.
Que no soporta la falta de cariño y respeto ante un anciano solitario.
Viajar por el mundo mientras la salud me lo permitió.
He llegado a una edad en la que atesoro cada día una de las mejores cosas de la vida, la convivencia humana con amor y fraternidad.

Ésta soy yo y hoy tengo un año más.


jueves, 2 de enero de 2025

REGALOS

 


En estas fiestas el consumismo aumenta por encima de lo normal. Qué es para ti un regalo.
Para mi un regalo no es algo físico envuelto en un papel bonito, para mi es un intercambio de ilusiones.

El mejor regalo tal vez no sea costoso, pero sí valioso. Desde este mundo virtual mi regalo para ti serían muchas cosas: te regalo por ejemplo las palabras "quiero verte feliz", aunque no te pueda regalar el sol, te regalo el calor profundo de mis abrazos.
Te regalo un par de mis latidos, aquellos que nacen cuando reímos sin parar. Quizás no sea el regalo de moda pero te ofrezco mi memoria
para grabar tus sueños y recordarlos si hiciera falta. No te regalo una canasta llena, te regalo mis manos vacías, un día las puedes usar.
No sé si mi regalo es acertado, pero es lo mejor que te puedo ofrecer.
Te regalo mi aliento, te regalo mis oídos si necesitas hablar.
Te regalo mis fuerzas por si decides luchar.
Son presentes sencillos que están llenos de cariño, de agradecimiento por llevar conmigo en este blog casi veinte años. 
Y por último sólo quiero recordarte que si estás vivo, ya has recibido el regalo más grande.