Voz de mi hija. "Without you. Sin ti"

Voz de mi hija.

miércoles, 5 de agosto de 2009

LA MELODÍA DE LA VIDA





La VIDA, la más hermosa melodía marcada al compás rítmico del corazón.
Cada vida es una melodía propia, que va improvisando día tras día nuevas notas que forman armonía. Y como en toda melodía, se aceptan corcheas, blancas, negras y redondas. Y algo fundamental en el pentagrama - cinco líneas paralelas y cuatro espacios que utilizamos para escribir los signos musicales: los silencios.

Algunas notas se escapan de la escala musical. Son los errores que cometemos que unas veces llegan a interrumpir la armonía y otras, son capaces de cambiar este pentagrama y elegir un nuevo destino, creando una nueva escala.

Los instrumentos que encajan en esta orquesta musical y dan toda la belleza a esta melodía, son las emociones.




Y así, hasta que llegue el final siempre genial y esperado. Llegará el momento en que culmine todo, llegará el silencio . El tan apreciado silencio que dará la última nota final.

Y después, los aplausos .....

La Vida es como una canción. Cualquier canción que nos hace estremecer el alma. La vida es una melodía encantada.


Silencio ....... Aplausos ....... Silencio ........







9 comentarios:

  1. Hay que tener el gusto de cantar...
    Amar el canto, la música...
    Entregarse a ella...
    Disfrutarla, y amarla...
    Y sobre todo, compartirla.
    Besos y salud

    ResponderEliminar
  2. Genin:

    Creo que lo he dicho infinidad de veces, la música forma parte de mi vida, la necesito y me parece esencial. Sé que tú cantas, que lo haces de vez en cuando. Yo me siento en mi piano y a pesar de mi poco solfeo a veces hasta le hago sonar. En cambio mi hija pequeña le hace vibrar.

    Salud, amigo.

    ResponderEliminar
  3. Como siempre , muchas veces he tenido tiempos en sostenidos donde las alteraciones van modificando constantemente la entonación de altos y bajos en mi pentagrama de vida.
    La música es una de las mejores formas para refugiarme en momentos críticos donde quiero tener calma, paz y dejar que la melodía me lleve a los más recónditos lugares que en ese momento deseo y evadir los sinsabores que muchas veces invaden mi mente.
    Un abrazo Airblue.

    ResponderEliminar
  4. Desde luego encontraste una bonita similitud entre una canción y la vida... A mi, personalmente, me gusta disfrutar de esos silencios...
    Besitos, linda.
    Natacha.

    ResponderEliminar
  5. Precioso!!!Que entradas mas lindas haces.

    Besitos

    ResponderEliminar
  6. Martín:

    Tienes razón, la música es un buen refugio cuando las sombras oscurecen la mente, cuando las emociones son nuestros mejores aliados y cuando soñamos, se sueña mejor con una melodía de fondo.

    Gracias querido amigo, como siempre.

    ResponderEliminar
  7. Natacha:

    Disfruta de los silencios, pero no dejes nunca de cantar, carita guapa.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Gata:

    Bonitas no sé.... pero lo que sí es cierto es que me las pienso mucho. Me gusta filosofar de vez en cuando.

    Gracias Gati, ¿cómo estás?.

    ResponderEliminar
  9. ¡Qué bonita que sos, Air...!

    Es hermoso el modo en que expresás lo que guarda tu alma, me conmueve.
    La vida es una melodía, y si bien algunos errores pueden interrumpir la armonía a veces, es parte de la vida y de la música.
    y aunque se cambie el pentagrama, siempre es tiempo de crear una nueva escala, un nuevo camino, una nueva esperanza y una inédita melodía.

    En eso estaba, Air, cuando llegaste a compartir mi visita al jardín. Admiraba a esas pequeñas flores que sobrevivieron al crudo invierno que tuvimos...tan pequeñas, con una apariencia tan frágil y a la intemperie; mientras yo acobardada y con las manos entumecidas me quedaba encerrada y hasta las ignoré.

    Pensé en trerte un ramito, pero no me atreví a cortar ninguna, hoy son el aplauso...y un canto a la vida!

    Prefiero enviarte un foto...¿vale?

    Un abrazo grande para vos, que sos una hermosa melodía.

    Besos

    ¡Preciosa la cabecera del blog!

    ResponderEliminar