Desde Argentina recibo un nuevo premio otorgado por alguien que se ha ganado el cariño y el respeto de muchos amigos. Alguien a quien yo aprecio mucho y agradezco este regalo dándole el valor que se merece. Mi querida amiga SAFIRO.
Y con su permiso voy a utilizar su regalo para escribir una nueva entrada ya que me parece interesante conocer un poco mejor a este gran médico, alquimista y filósofo llamado PARACELSO.
Nacido en Suiza en 1493. Estableció el rol de la química en la medicina. Publicó el gran libro de la cirugía en 1536 y una descripción clínica de la sífilis en 1530.
Sus descubrimientos médicos fueron muy importantes. En 1530 escribió la mejor descripción clínica de la sífilis de la época aprobando el tratamiento de esta enfermedad por medio de la ingestión de pequeñas cantidades de mercurio cuidadosamente medidas. Afirmó que la enfermedad de los mineros (Silicosis) era resultado de la inhalación de vapores de los metales y no una venganza de los espíritus de las montañas. Fundó las bases de la homeopatía moderna.
Fue el primero en conectar las parotiditis más conocidas por paperas con la ingestión de agua con metales (en gral. Plomo). Y realizó numerosos remedios para numerosas enfermedades.
.
Fue el primero en conectar las parotiditis más conocidas por paperas con la ingestión de agua con metales (en gral. Plomo). Y realizó numerosos remedios para numerosas enfermedades.
.
Las siete reglas fundamentales de Paracelso:
LO PRIMERO ES MEJORAR LA SALUD.
Decía que para ello hay que respirar profunda y rítmicamente al aire libre, llenando bien el abdomen. Beber diariamente en pequeños sorbos, dos litros de agua, comer muchas frutas, masticar los alimentos del modo más completo posible, evitar el alcohol, el tabaco y la automedicación, así como bañarse diariamente.
2. DESTERRAR ABSOLUTAMENTE DEL ESTADO DE ÁNIMO, POR MÁS MOTIVOS QUE EXISTAN, TODA IDEA DE PESIMISMO, RENCOR, ODIO, TEDIO, TRISTEZA, VENGANZA Y DE POBREZA.
O sea, para ello debe huirse, como de la peste, de toda ocasión de tratar a personas maldicientes, viciosas, ruines, murmuradoras, indolentes, chismosas, vanidosas, vulgares, o que la base de sus ocupaciones y conversaciones sean tópicos no éticos ni morales. Esta regla es de importancia decisiva, por cuanto se trata de cambiar la contextura espiritual del alma. La suerte no existe y el destino depende de los propios actos y pensamientos.
3. HACER TODO EL BIEN POSIBLE
Esto es, auxiliar a todo desgraciado siempre que se pueda, pero jamás tener debilidades por ninguna persona. Cuidar las propias energías y huir de todo sentimentalismo hueco.
4. OLVIDAR TODA OFENSA, MÁS AÚN: ESFORZARSE POR PENSAR BIEN SIEMPRE
Por ejemplo, todos los grandes seres se han dejado guiar por esa suave voz interior. Hay que destruir todas las capas superpuestas de viejos hábitos, pensamientos y errores que enmascaran la profunda esencia del ser, que es perfecta.
6. GUARDAR SILENCIO DE TODOS LOS ASUNTOS PERSONALES.
O sea, abstenerse, como si se hubiese hecho un juramento solemne, de referir a los demás, todo cuanto se piense, se oiga o se descubra, hasta tanto se verifique, compruebe o se tenga la completa certidumbre.
7. JAMÁS TEMER A LOS SERES HUMANOS, NI QUE INSPIRE SOBRESALTO LA PALABRA “MAÑANA”.
Decía Paracelso, que cuando el alma está fuerte y limpia, todo sale bien. Jamás creerse solo, ni débil. El único enemigo a quien se debe temer es a uno mismo. El miedo y la desconfianza en el futuro son madres funestas de todos los fracasos, atraen las malas energías y con ellas el desastre. Si se estudia atentamente a las personas triunfadoras, se verá que intuitivamente observan gran parte de las reglas que anteceden. Por otro lado, la riqueza no es sinónimo de dicha. Puede ser uno de los factores que conduzcan a ella, por el poder que ofrece para hacer buenas obras; pero la dicha más duradera solo se consigue por otros caminos; allí donde nunca impera el antiguo Satán de la leyenda, cuyo verdadero nombre es egoísmo. Jamás debe quejarse uno de nada, hay que dominar los sentidos; huir tanto de la autocompasión como de la vanidad.
La autocompasión sustrae fuerzas y la vanidad las paraliza.
Palabras del autor del premio:
"Paracelso le otorga a la palabra un sentido mágico. Un sentido que en la magia se llama "Verbo". Esto es que la palabra puede crear. La palabra es una fuerza, pero hay palabras que poseen esta fuerza de un modo mayor o menor. Hay poder en la palabra, pero también hay palabras de poder. Este poder no se limita a la palabra, si no que está también presente de alguna manera en los signos, la magia, las imágenes y las letras ".
Muchas gracias por tu cariño, SAFIRO.
Air, que maravilla de entrada. Me ha encantado descubrir la sabiduría de Paracelso.
ResponderEliminarSus 7 reglas son 7 tesoros, que la vida me ha ido mostrando y enseñando. No tenía ni idea d ela profundidad de pensamiento de Paracelso.
Me encanta descubrir cada día lo que este mundo bloguero nos va mostrando a través de unos u otros.
Hoy has sido tú la maestra. Gracias.
Un beso... espro que ya estés al 100%
Gracias pizarr, voy mejor, casi casi estoy al 70%, el miercoles voy al médico, a ver si me baja un poco la medicación, a veces estoy demasiado sedada.
ResponderEliminarOtro beso.
Pues aquí no he tenido ninguna dificultad para entrar, pero curiosamente, no pude comentar en tu anterior entrada, es mas, tenia que quitar todos los programas porque no me dejaba entrar en ningún sitio, una vez de que había pinchado y se abría la ventana para comentar que siempre se quedaba en blanco.
ResponderEliminarMe alegro que al menos estés al 70% como le dices a Pizzi.
Es la primera vez que veo que un premio sirve para algo.
Tenia al pobre suizo, totalmente olvidado.
Magnifica tu entrada.
¡ A por el 30% que falta!
Un beso y salud.
Bonita, muy cultural la entrada me has enseñado y he aprendido algo más en esta vida.
ResponderEliminarEspero que te encuentres bien y ánimo mi niña.
Un Beso Airblue.
AIRBLUE
ResponderEliminarlas reglas de Paracelso son consejos llevados a la práctica nos ayudan el cuerpo y el espíritu.
Ponte buenecita del todo Reina,te lo deseo con toda la fuerza.
un besito guapa
Air, espero querida amiga, que recuperes poco a poco ese 30%.
ResponderEliminarMuy bonita, y educativa para la convivencia humana. No sabia nada de este gran cirujano.
Las normas, no tienen ningún desperdicio, pues son muy ciertas, aunque cuesta a veces eso de olvidar el daño que te hacen. Mas si entra el corazón por medio. Pero es lo que hay que hacer.
Besitos, Leo.
Si es que estos suizos..., jajaja
ResponderEliminarAirblue corazón, pásate por mi casa tienes una cosita:
http://parapequesynotanpeques.blogspot.com/2008/04/premio-amigas-blogueras.html
Un besito
AIRBLUE
ResponderEliminarTienes una nueva sorpresa en mi blog....sin prisas y sin compromisos.
un besito guapa
Enhorabuena por el nuevo premio, siempre descubro algo nuevo contigo.
ResponderEliminarSaludos
Instructiva entrada, me ha encantado leerla, gracias.
ResponderEliminarBesitos azules
Enhorabuena corazón. Te mereces muchos más.
ResponderEliminarBesotes
Enhorabuena por el premio.
ResponderEliminarMe alegra saber que estás mejor.
Ahhh decirle a Safiro que tengo una gran amiga en Buenos Aires, vino a conocerme este otoño.
Sois gente encantadora!
¡¡Maravilloso!!
ResponderEliminarAquí si que le has dado brillo al premio!
Un placer que sirviera para esto, vale la pena realmente.
Doblemente te felicito, por el premio que bien merecido lo tienes y por esta entrada bellísima por la enseñanza.
Por supuesto ya lo copié y se lo envié a mis hijos a sus correos.
Gracias a vos!!
Te quiero, te abrazo fuerte, brindo por ese 70% y vamos por el
30% que falta!!
MIL BESOS!!
En primer lugar, felicidades por el premio.
ResponderEliminarDesdeluego Paracelso, además de un excelente médico e investigador era un sabio.Sus reglas son básicas para la salud de cuerpo y la del alma, ambas necesarias para un equilibrio total.Por ejemplo la segunda es imprescindible para reforzar la primera, y así todas las demás.
Un montón de besos querida amiga.
Que tengas un hermoso día
ResponderEliminarBESOTES!
Tienes que recoger algo en mi casita.
ResponderEliminarBesos