Voz de mi hija.

Voz de mi hija.

martes, 19 de mayo de 2015

ETERNA BELLEZA

 
 
 

Cuando se acaba de pasar por un trance desagradable, tratamos de buscar una manera más positiva de ver las cosas, quizá sea conformidad o resignación,  pero viene bien pensar que no todo en la vida es malo, que a pesar de todo la bondad existe, es la única inversión que no falla. En filosofía analizando el comportamiento se suele decir que el ser humano es malo por naturaleza. Muchas teorías lo sostienen. Fue Hobbes el que advirtió que en el estado de naturaleza el hombre no es pacífico, sino más bien “un lobo para el hombre” y por lo tanto se une en sociedad con el único interés de sobrevivir. También Kant defendía esta postura, argumentando que es la razón práctica la que obliga al hombre a renunciar a ese estado de guerra y a buscar la paz en sociedad. Y Freud considera la agresividad como innata en el ser humano y dicta que es la cultura la que debe reprimirla, claro que no es de extrañar porque Sigmund Freud no creía en el ser humano, para él solo somos objetos. Pero siempre me hace pensar en dr Jekyll y mister Hyde.
Es cierto que hoy en día, en las sociedades actuales, podemos decir que el mayor enemigo del hombre es el hombre. Somos la única especie que ataca premeditadamente y no por instinto, no se trata de supervivencia ni de defensa propia, nos movemos guiados por intereses egoístas, somos intolerantes y posesivos.
Pero existe gente fantástica, llena de virtudes y bella, muy bella. No hay más remedio que aferrarse a esta teoría para ver la vida de diferente color y buscar siempre el lado bueno y hermoso de todo lo que nos rodea.
Y si no, miremos lo que la vida nos ofrece, veamos la belleza como la marca que suele sonreír con esplendor en la bondad, en la verdad y en el amor que hay en las obras que hacemos.


 
Apreciado don el de la belleza, cualidad amplia que se muestra variable a nuestros ojos, acorde con la grandeza de todo lo que nos rodea y los sentidos pueden alcanzar.


La belleza natural, la abstracta, la interna.


La belleza natural de las flores salpicadas de perfume y vestidas de gotas de rocío. De los pájaros, que agitando sus alas entre las ramas saludan al nuevo día. De la tierra, los animales, las plantas, la luz y el calor de los rayos solares que juegan dibujando formas en las montañas. La belleza de los ríos, cuando convierten sus aguas en espejos y su murmullo interpreta la mejor sinfonía, con notas de viento y el compás de los remolinos. La belleza del aire cuando huele a lluvia, a flores o no huele a nada, solo a brisa fresca.
La de la luna, mientras la noche nace entre sombras y vapores de ceniza, la de las estrellas que llenan el cielo de lunares de plata. La belleza del mar, que onda tras onda va peinando la orilla haciendo cabriolas entre la espuma.
La del arco iris, el azul del cielo, el amarillo de las arenas, el rojo del atardecer, el blanco de los almendros, el gris de las tormentas, el negro de la noche, los verdes primaverales y toda una gama de colorido que la naturaleza nos regala con el aroma del cerezo en flor, del tomillo y la lavanda.
La belleza de las nubes, míralas, son como algodones de muchas formas, entre todas sostienen el mundo y son el destino del trueno y del rayo, de la lluvia lenta, de la nieve y el viento. Son todas iguales y a la vez distintas. Míralas, son como las olas del mar y con un gran alma secreta.

La belleza abstracta. Quién no conoce la hermosura de la inocencia, el brillo de una mirada, no se enternece ante la paz de un niño durmiendo y no se estremece con el ritmo de una música romántica. Demasiada belleza a nuestro alrededor...

Existe, sin embargo, otra belleza distinta, más profunda, y mucho más importante. La gratitud, la alegría, el optimismo, ese gusto por vivir para un proyecto, la solidaridad, la fidelidad, la profundidad de una pareja abierta a las flaquezas del otro, la belleza de la paternidad y la maternidad. Son bellezas que no se ven a primera vista, pero son tesoros que brillan con una claridad inmensa.

 Ya solo me queda nombrar la belleza de un corazón noble y la más pura de todas, la que nos pasa desapercibida, la belleza del alma que se extiende como una luz misteriosa por todo el cuerpo.
 


La belleza no hace feliz al que la posee, sino a quien puede amarla y adorarla. Por eso es tan lindo mirarse en esos rostros que se convierten en nuestros paisajes favoritos.
 Herman Hesse





11 comentarios:

  1. Somos tan inconscientemente estúpidos que somos capaces de cargarnos el planeta por dinero que irremisiblemente tendremos que dejar aquí cuando muramos... :(
    Besos y salud

    ResponderEliminar
  2. Que bonito lo que nos has dicho, es para reflexionar y pensar si poseemos alguna de esas cualidades de la belleza, porque conozco a muchos que si las tienen, por lo menos yo se la encuentro, quizá cada uno tenemos una percepción diferente de la belleza.
    La belleza nos inunda de paz, podría ser una buena terapia para los gruñones. Me lo he leído dos veces para acordarme de todo, si se me olvida volveré a repasármelo. Abrazos contentos

    ResponderEliminar
  3. La belleza está ahí, sólo hay que verla, pero yo, como dice Ester, soy un poco gruñona, y obuservo que cuando la naturaleza se vuelve fiera... mejor huir. Creo que ni el hombre es malo por naturaleza ni bueno por naturaleza, como decía Rousseau, Pero la bondad debe ser nuestro propósito y nuestro objetivo, porque maldad hay mucha maldad, por desgracia. Precioso texto.

    ResponderEliminar
  4. Creo en que el ser humano nace con esa "Belleza", de Alma, que según la Vida, SU VIDA lo va formando o transformando, en el SER que luego ES.
    Nada mas que hay que mirar la carita de un niño, cuanta pureza, sinceridad y mirada sonriente que se entrega a quien lo mira..

    Creo en el Ser Humano.
    Luego esa Vida que le toca Vivir, lo moldea según su Vivir.

    manolo

    ResponderEliminar
  5. Mi niña, yo siempre he pensado que el hombre era bueno y que la sociedad lo había transformado.
    Pronto pude comprobar que no era así, que de todo había en la viña del Señor.
    La maldad, la ambición, me horrorizan y trato de huir de ellas.
    Prefiero valorar y admirar esa belleza que nos ofreces al describir en prosa lo que a mí me parece un bello poema. Mil felicitaciones.
    Cariños en el corazón y en tu alma bella.
    kasioles

    ResponderEliminar
  6. Vuelvo para agradecerte esas cariñosas palabras que has dejado en mi espacio.
    Entiendo tu sentir, pero sus recuerdos nos ayudan a mantenerlos vivos en nuestro corazón.
    Más cariños.
    Kasioles

    ResponderEliminar
  7. Hermosa reflexión , donde trasmites con tus razonamientos filosóficos un retrato de la humanidad
    A veces pasabas por alli , el niño se ahogaba y no dudas sin ser un gran nadador en aRROJARTE aL AGUA.
    Después de leerte detenidamente y pensar en ti, me siento orgulloso de ser humano
    Has llenado mi día de belleza!!!
    Besos
    André

    ResponderEliminar
  8. Airblue, tu entrada de hoy es muy instructiva y reflexiva, en este mundo impera más el egoísmo, los intereses etc....
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Hola Airblue, pues creo que el hombre tiene tendencia al mal y según tenga su educación y el entorno social, Puede ser más malo o más bueno, pero tiene la capacidad de pensar y escoger cómo quiere ser y una conciencia que delata todos sus actos, a menos que esté loco, que le impida el raciocinio.
    Me quedo con la bondad de las personas a pesar de todo. Soy positiva y disculpo muchas conductas, aunque más de una vez me enfade ¡jaja!
    Has hecho una buena entrada amiga.
    Gracias
    Un gran beso de ternura.

    ResponderEliminar
  10. En la Belleza del Alma habita la única Verdad.

    gracias.

    ResponderEliminar
  11. En la Belleza del Alma habita la
    Única Verdad.

    Gracias

    ResponderEliminar