Nada más saludable que la vieja costumbre española de tomar doce uvas coincidiendo con las doce últimos segundos del año como ‘ritual’ para atraer la suerte. Tan arraigada está esta tradición que cada fin de año son consumidos ni más ni menos que unos 500 millones de uvas, pero... ¿de dónde procede exactamente esta ‘ceremonia gastronómica’?. Pues bien, según la mayoría de las teorías parece ser que todo empezó cuando, en el año 1909, los viticultores cosecharon tal cantidad de uvas que, al no saber qué hacer con el excedente, decidieron repartirlo gratis entre la ciudadanía inventando que su consumo en Nochevieja traería fortuna. Y debió de traer mucha porque, desde aquel año esta tradición se ha seguido celebrando hasta hoy e, incluso, algunos países sudamericanos han empezado también con esta costumbre.
Hoy colgaré temprano la luna
cerraré mis ojos
y de memoria colocaré las estrellas
para que los poetas naveguen en busca de sus musas
la pondré risueña
para que los poetas siembren flores en los corazones.
Estamparé un lucero en la hamaca de su risa
un beso de infinito
para que sueñen los enamorados.
Hoy colgaré la luna en un cielo limpio
que no haya nubes que le estorben
y que los suspiros
la vayan elevando
en hilos de prosas, de versos y de sueños.
Hoy colgare la luna
y la bajaré despacio para pintarla de aurora
la bajaré para ponerla a tus pies.
Cierra los ojos, piensa en todo lo que te hizo sonreír en el año que termina y olvídate de lo demás... Ojalá esas sonrisas se multipliquen por 2022 más.
FELIZ SALIDA Y ENTRADA DE AÑO.
Perdonad si no contesto individualmente a vuestros comentarios, muchas veces me faltan fuerzas y ahora en estos días también tiempo.
Yo bajaré la luna, con las uvas, que tan bien explicaste el origen de su consumo en España. Poe una salida mágica de año, y que el qoe asoma sea maravilloso para ti
ResponderEliminarUn abrazo grande
Preciosa dedicatoria. Feliz año. Un beso
ResponderEliminar¡Qué maravilla de poema! Por muchas sonrisas, como bien dices. En mi casa, mi madre y yo tomamos uvas pero de otra manera: damos doce sorbitos de moscatel.
ResponderEliminarBesos.
A pesar del los dos años tan dolorosos que hemos pasado, seguiremos brindando tras las uvas esperando un año mejor para todos.
ResponderEliminarTe deseo un feliz año 2022 para ti y los tuyos.
Un abrazo.
Mucho más agradable que las lentejas de los italianos.
ResponderEliminar;)
¡Feliz Año Nuevo!
precioso post y lleno de buenos deseos que también los tengo yo para ti.
ResponderEliminarFeliz 2022
Brindemos por un nuevo año. Para que nos traiga alegría y muchas cosas lindas.
ResponderEliminarTe mando un abrazo grande.
Con aportes como los tuyos todos los buenos deseos se cumpliran,estemos risueños y brindemos por el mundo en general. Buena entrada de año!!
ResponderEliminarMis buenos deseos para ti en 2022, con todo cariño. Estarás en mi brindis, por supuesto.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
precioso post y lleno de buenos deseos que también los tengo yo para ti
ResponderEliminarMenos mal que no puedo tomar alcohol que si no con tantas invitaciones ya me había emborrachado. Feliz año y un abrazo
ResponderEliminarQué entrada tan entrañable...
ResponderEliminarPrecioso.
Feliz Año nuevo.
Besos
Me gustó la historia, una tradición que se copia y que es buena sin dudas...
ResponderEliminarademás las uvas me encantan y ya empezó su tiempo por acá con mas variedades , ya sabes en Chile hay gran producción de vinos.
Así que un brindis por las cosas buenas.
Mucho ánimo para este 2022!