Semana Santa pasada por agua, siempre ocurre, lo que me apena son las cofradías que han preparado su salida en las procesiones y no pueden sacar la imágen que veneran. Entiendo su frustración, pero la meteorología no entiende de fechas.
Viendo la lluvia no puedo evitar pensar en aquellas Semanas Santas de hace años. Silencio y recogimiento en las Parroquias, las emisoras de radio sólo emitían música sacra, los cines se cerraban y en los centros y colegios se hacían aquellos ejercicios espirituales basados fundamentalmente en la meditación y en las pláticas dadas por sacerdotes , que por desgracia parecía que su fin era sembrar el terror y el castigo en cuanto al pecado se refiere. A los quince años estas charlas te marcaban de tal manera que no podías dormir por las noches, te hacían sentir culpable y de buena cristiana nada de nada. Qué manía con mostrarnos a un Dios vengativo y justiciero.
Afortunadamente aquella época ya pasó y los mareos por el olor a incienso en la Capilla del colegio se esfumaron como el humo. El ayuno y la abstinencia quedaron desfasados.
Hoy todo ha cambiado, la gente escapa como loca a sitios de playa, les importa poco los actos religiosos, los Oficios, el cirio Pascual y hasta las procesiones. Ésto último lo entiendo pero no lo comparto, tenemos la imaginería más valiosa de Europa, maestros como Salzillo, Diego de Siloé, Berruguete, Alonso Cano o Juan de Ávalos, merecen la pena mencionarse y si se puede, visitar sus excelentes esculturas o verlas en los diferentes pasos de las procesiones de Semana Santa.
Y si hay algo que siempre me ha llamado la atención y puedo decir que hasta me ha llegado a emocionar, quizá sea porque soy de tierra fría y en Castilla no era ni es fácil escuchar algo tan popular en Andalucía, es la saeta. La primera vez que tuve la ocasión de presenciar este canto en directo y con un frío tremendo fue en Albacete. Por motivos laborales mi familia se trasladó dos años a esta ciudad manchega y tengo que confesar que al oírla cantar desde una ventana y además improvisando, me estremeció y me encogió el alma. Desde entonces no he vuelto a escuchar este cántico religioso por excelencia que además tiene una tradición muy antigua.
Parece ser que SAETA, es de origen incierto, posiblemente venga del latín " sagitta ", verso o plegaria que va dirigida directamente a Dios o hacia la Virgen , como una flecha.
Las SAETAS son un canto religioso, principalmente improvisado, se cantan en procesiones de Semana Santa y el origen viene del folclore andaluz; son canciones de expresión libre, llenas de lirismo y de influencia árabe.
La SAETA Flamenca, es el sentir popular, el lamento, es el canto de la Semana Santa, el canto devoto y arrebatado de las procesiones, por petición, por sacrificio, por fe, y por tradición.
Dónde vas Paloma Blanca
a deshoras de la noche.
Voy en busca de mi hijo
que lo entierran esta noche.
Cantaba mi madre esta saeta antígua:
Dónde vas Paloma Blanca
a deshoras de la noche.
Voy en busca de mi hijo
que lo entierran esta noche.
Cuanta verdad en lo que dices y luego cuánta razón.
ResponderEliminarRecuerdo llevando las palmas a quemar para tener ceniza para el miércoles, el Domingo de Ramos estrenando ropa y palmas, las visitas a las iglesias, los encuentros con amigos de mis padres, a mi madre con mantilla, a mi padre en la procesión.
Los pasos y el silencio, la emoción y el recogimiento. Me acuerdo de todo.
He vivido la Semana Santa en Sevilla y en Málaga, me gusta mucho la de Murcia, pero las procesiones que mas me gustan son las castellanas.
Me voy que te gasto el blog.
Un abrazo y cariños
Bueno, ya sabes que no soy nada semanasantero, pero de verdad me apena cuando llueve y se quedan las cofradías sin sacar la procesión, sobre todo me da mucha pena por los niños, y la gente en general que se pasan el año preparándose para las procesiones, menos mal que parece que en Sevilla no va a llover el Jueves, algo es algo.
ResponderEliminarA mi también me gustan las saetas bien cantadas.
Besos y salud
Es una pena para las Cofradías que esperan con fervor (o no tanto) la llegada de ese día para salir a la calle y no puedan hacerlo. Afortunadamente, por aquí no suele pasar aunque también recuerdo algún año de Viernes Santo con lluvias. En mi memoria tengo los trajes nuevos hechos por mi madre para estrenarlos en Semana Santa... ¡Qué tiempos! Abrazos
ResponderEliminarCuantos recuerdos me has traido.
ResponderEliminarRecuerdas cuando en Cuaresma se tapaban los Altares y las Figuras de Santos, con unos Velos de color morado y que luego el Sábado de Gloria (Hoy Sábado Santo)se descorría por la Resurrección del Señor.
En Sevilla el Jueves Santo, para llamar a los Fieles a la Oración, La Giralda, en vez de tocar las campanas, tocaba la MATRACA.
Son cosas que se ha perdido.
Me ha gustado mucho tu escrito y la Saeta que cantaba tu Madre.
Abrazos manolo
La saeta me sorprendio mucho cuando a oi, pero lo que encogio el corazon los legionarios con el cristo y cantando "el novio de la muerte" ufff. un besiabrazo
ResponderEliminarEster:
ResponderEliminar¿Y no fuíste con el cole a la procesión de las palmas?. Se me ha olvidado ponerlo. Uniforme gris de cuadros verdes y un velo blanco hasta la cintura, recorríamos las calles de Burgos hasta llegar a la Catedral con una palma larga, era el uniforme de las teresianas.
Tiempos que jamás volverán.
Genín:
ResponderEliminarYa sé cómo eres y que te apena que las cofradías no salgan. Hay cosas que aunque no seamos religiosos, respetamos y entendemos la fé de los demás.
La saeta como dices, bien cantada a mí me estremece.
Besos hoy morados.
Ligia:
ResponderEliminarLos tiempos cambian y nos hacen cambiar. Hoy día no se concibe una Semana Santa como la de antes, no sé si hemos perdido o hemos ganado, lo que sí sé es que las tradiciones se deberían respetar.
Un abrazo.
Manolo:
ResponderEliminarAquí la matraca se llamaba carraca, no sé si es lo mismo pero también se usaba en las iglesias, como señal de duelo hasta el domingo de Resurreción. Yo encontré una hecha a mano en una feria de artesanía y la guardo como oro.
Gracias querido amigo, cuídate.
mjesus:
ResponderEliminarSí tienes razón, impresionan los legionarios paseando el Cristo de la Buena Muerte y cualquier procesión en silencio y a oscuras solo oyendo los pasos de los penitentes al ritmo sordo de un tambor.
Un abrazo.
Querida Reme, todo ha cambiado mucho.................me gusta y me emociona las saetas, y los legionarios portando al Cristo de la Buena Muerte y me parece preciosa la que cantaba tu madre.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Isabel
Besana:
ResponderEliminarHa cambiado muchísimo, pero todos los extremos son malos y en el término medio está la virtud.
Mi madre cantaba creo que de todo un poco.
Un abrazo azul para tí, Isabel.
ResponderEliminarQué bello puede llegar a ser el día
cuando la bondad lo ha iluminado...
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Qué la Gloria del sábado Santo
nos ilumine a todos...
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Deseo pases una tarde
donde se acomoden los
sentimientos en el
seno de los ruiseñores.
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Atte.
María Del Carmen
Gata Coqueta
ResponderEliminarSon bonitas tus palabras, que nunca me falten.
En cada estación, en cada época del año o Fiestas señaladas, te pasa como a mi, que no hago más que recordar como era todo en el pasado, y no para añorar sino para pensar con agrado en lo que era bueno, dejando de lado lo que no me gustaba.
ResponderEliminarActualmente paso siempre la Semana Santa sola, en casa y salgo para ir a algunos oficios religiosos. De estar buen tiempo hubiera ido a Ferrol a ver las procesiones que son muy bonias pero ha estado lloviendo y las más importantes incluso no han podido salir.
Me encanta la foto de la procesión, en Burgos, que tienes en la cabecera.¡Es fanastica!
Un cariñoso abrazo.
Bueno yo pasé por todo eso y lo tengo asimilado sin más. Fue una etapa en mi vida que disfruté como tantas otras etapas, ni mejores ni peores porque entonces no tenía estas vivencias y era más joven.
ResponderEliminarLa vida es acumular experiencias, y vivir el día a día. Gracias a todo lo vivido he ido aprendiendo a caminar y hacerme más fuerte.
Bss y que tengas una semana estupenda
Parece que estabas a mi lado en la capilla del colegio, hemos vivido casi las mismas cosas aunque yo fuí al colegio El Santo Angel pero el uniforme similar el velo y los rezos en la capilla con sus desmayos igualicos jejejejeje.
ResponderEliminarPor aqui ha hecho muy buen tiempo, con sol y altas temperaturas para poder ir a la playa por la mañana y por la tarde a las procesiones,como ves el dia completo, bueno eso es lo que han hecho los turistas, yo me he ido a mi palacete de fin de semana, jajajaja.
Besitos
Chela:
ResponderEliminarEs verdad, intento comparar para quedarme con lo bueno y olvidar lo menos bueno.
No hemos salido, la lluvia nos ha retenido y librado de las caravanas. En casa se está muy bien.
Un abrazo querida amiga.
Katy:
ResponderEliminarLa vida es una contínua enseñanza y maduramos con la experiencia. Aquellas Semanas Santas nada tienen que ver con las de hoy y aunque eran años de auténtico fervor religioso, tenían algo especial que ahora se ha perdido.
Un beso Katy
Asi que la gata que siempre me acompañaba en las procesiones eras tú ???????, ya decía yo que me sonabas de algo. El velo nos llegaba hasta la cintura y se sujetaba con una goma ¿recuerdas?, lo peor es que te apetecía cantar y te tapaban la boca.
ResponderEliminarAquí estamos llenos de ranas, corren por las calles con paraguas.
Besos de lluvia.
Interesante entrada, cambian las costumbres de acuerdo a los lugares, pero todos tienen su belleza.
ResponderEliminarUn bello texto.
Un abrazo y linda semana.
Preciosa entrada, a la que le has puesto tanto amor.
ResponderEliminarMe gusta la semana santa, por las procesiones, en cada localidad se vive de distintas formas, pero con el mismo sentimiento, no cabe duda que en la zona de Andalucía, se vive de una manera especial, para mí la procesiones que más me emocionan son las de viernes santo por la tarde, la del silencio por la noche, y también la de domingo de resurrección.Las saetas son dignas de escucharlas pues es un canto con mucha fe y mucho fervor.
Gracias por poner globos azules en tu blog.
Un beso
Betty:
ResponderEliminarGracias por venir aunque ya ha terminado la Semana santa. cada lugar tiene sus costumbres, su encanto, pero se han perdido muchas cosas. Ya no es lo mismo.
Un abrazo
Julia :
ResponderEliminarGracias a ti por visitarme y comentar. Los globos azules son también mis preferidos y desde ahora mucho más.
Un abrazo por ser como eres.