Se dice, se habla, se comenta de melancolía cuando llega el otoño, no voy a repetir lo de siempre, escribir sobre dorados y ocres que entierran las hojas muertas. Mejor hacer alusión a la belleza. La belleza, una mirada mas allá de los ojos, una mirada del corazón. Es rico quien tiene la capacidad de admirar la belleza, sea cual sea la estación, sea cual sea el estado de ánimo que lo embarga.
La belleza natural, la abstracta, la interna.
La belleza natural de las flores salpicadas de perfume y adornadas de gotas de rocío. De los pájaros, que agitan sus alas entre las ramas de los olmos, de la tierra, los animales, las plantas, la luz y el calor de los rayos solares, que dibujan formas en las laderas de los valles y montañas. La belleza de los ríos, cuando sus aguas parecen espejos y su ruido la sinfonía mejor interpretada con la partitura del viento y el ritmo de los remolinos. La belleza del aire cuando huele a lluvia, a flores o no huele a nada, solo al frescor que nos deja en la frente.
La de la luna, mientras la noche nace entre sombras y vapores de ceniza, la de las estrellas que parecen clavos de plata cubriendo el cielo. La belleza del mar, que onda tras onda va formando la espuma para besarte los pies en la playa.
La del arco iris, el azul del cielo, el amarillo de las arenas, el rojo del atardecer, el blanco de los almendros, el gris de las tormentas, el negro de la noche, los verdes primaverales y toda una gama de colorido que pinta la naturaleza.
Los olores del cerezo en flor, del tomillo y la lavanda.
La belleza de las nubes, míralas, son como algodones, de muchas formas, redondas y blancas. Entre todas sostienen el mundo y son el destino del trueno y del rayo, de la lluvia lenta, de la nieve y el viento. Son todas iguales y a la vez distintas. Míralas, son como las olas del mar y como la espuma se disuelven.
Y la belleza abstracta. Quién no conoce la hermosura de la inocencia, el brillo de una mirada, no se enternece ante la paz de un niño dormido y no se estremece con el compás de una música romántica. Demasiada belleza a nuestro alrededor. Ya solo me queda nombrar la belleza de un corazón noble y la más pura de todas y quizá la que más pasa desapercibida, la belleza del alma.
Los olores del cerezo en flor, del tomillo y la lavanda.
La belleza de las nubes, míralas, son como algodones, de muchas formas, redondas y blancas. Entre todas sostienen el mundo y son el destino del trueno y del rayo, de la lluvia lenta, de la nieve y el viento. Son todas iguales y a la vez distintas. Míralas, son como las olas del mar y como la espuma se disuelven.
Y la belleza abstracta. Quién no conoce la hermosura de la inocencia, el brillo de una mirada, no se enternece ante la paz de un niño dormido y no se estremece con el compás de una música romántica. Demasiada belleza a nuestro alrededor. Ya solo me queda nombrar la belleza de un corazón noble y la más pura de todas y quizá la que más pasa desapercibida, la belleza del alma.
Decía Óscar Wilde estas hermosas palabras:
La belleza es la única cosa que el tiempo no puede dañar. Las filosofías se dispersarán como arena, las creencias se sucederán unas a otras como las hojas marchitas del otoño; pero lo que es bello representa un goce para todas las estaciones y una posesión para toda la eternidad.
Si Oscar Wilder escribió esas palabras tan hermosas, la Belleza del Texto por ti escrito, le ganan, ya que es pura Poesía, esos Pensamientos por ti expresados.
ResponderEliminarQue he disfrutado leyéndote.
Te vas superando cada día que escribes, para deleite nuestro.
No ha habido un Otoño también loado.
manolo
“Son como las olas del mar y como la espuma se disuelven”.
ResponderEliminarTu prosa es poesía, me has hecho disfrutar, he escuchado las risas infantiles y ahora asomada a la ventana espero verlo llegar como tu lo has pintado. Un abrazo
Me encanta esta época con olor a tierra mojada,café y buenas letras como las tuyas.
ResponderEliminarUn abrazo
Tienes toda la razón cuando dices que es rico quien es capaz de ver la belleza y apreciarla, aunque parezca una tontería, no siempre apreciamos la belleza, hoy día se lleva una vida muy agitada, todo es deprisa, deprisa, y es una pena porque se nos escapa la apreciación de tanta belleza que nos rodea.
ResponderEliminarBesos y salud
Ya lo sabía yo que estaba al caer:-) Me alegro por tu otoño y que lo disfrutes al máximo.Yo disfrutaré de las postales que me ofrece la caída de las hojas...
ResponderEliminar"El otoño abre nuevamente sus puertas, empieza el lento del caer de las hojas y los árboles pronto mostrarán sus ramas desnudas. El suelo alfombrado de dorados y ocres marca bajo mis pies el sendero transitado. Más recuerdos se sumarán a mis ya cumplidos veranos…
Lo escribí esta mañana y creo que ilustran bien tu post y mi comentario:-)
Bss
Si me permites, hoy, concuerdo totalmente con Genin. Es tan poca la gente que puede apreciar la belleza, tu escrito es pura poesía que desborda belleza en sí mismo.
ResponderEliminarMuy bueno!!!
Cariños…
Hola Airblue, ¡¡fantástica entrada!! Me ha emocionado leerla, pues soy de las personas que encuentra la belleza en la mayoría de lo que nos rodea.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sólo hay que abrir los ojos interiores y dejar vagar la mirada para ver toda la belleza que la vida pone ante nosotros.
ResponderEliminarAunque parece sencillo no lo es tanto...
Besitos.
Manolo:
ResponderEliminarUna vez te dije que cuando siento nostalgia o no me encuentro como debo, trato de buscar lo que tengo a mi alrededor y parece que funciona. A veces estas rodeado de gente y prefieres un poco de silencio interior.
Gracias amigo.
Ester:
ResponderEliminarLlegó el otoño por fin, sabes que no me gusta el calor, tampoco los días tristes pero aún asi no dejan de ser bellos.
Volvió el otoño y de nuevo los recuerdos inevitables.
¿Le viste llegar desde tu ventana?
Traía una enorme capa azul.
Genin:
ResponderEliminarTú la tienes a mano, estás en contacto con la naturaleza y rodeado de cosas bellas.
Gracias y cuídate.
Luismi:
ResponderEliminarYa somos dos, me encanta su colorido, su olor, sus frutos y es tiempo de recogimiento.
Abrazos.
Katy:
ResponderEliminarYa sé que lo esperabas y tu escrito es precioso. No te resbales con las hojas, va en serio, no hay cosa peor que pisar un suelo con hojas mojadas.
Ya lo he experimentado.
Un abrazo.
Oriana:
ResponderEliminarTienes razón, la costumbre y las prisas hacen que no nos fijemos en todo lo bello que tenemos alrededor y hay mucho.
Muchas gracias.
Priego:
ResponderEliminarA mi me ocurre lo mismo. Me gusta cuando llega esta época sentarme en un banco y fijarme en cualquier arbolillo, asi respiro tranquilidad que buena falta hace.
Un abrazo otoñal.
Belén:
ResponderEliminarMe gustan tus palabras, también suenan a poesía.
Gracias por venir y feliz otoño.
Belleza tiene tu corazón al sentir y poder expresar en letras todo la belleza que encierra la Naturaleza que nos rodea.
ResponderEliminarMe encanta como has descrito la belleza que esconden esas aguas transparentes de los ríos y la melodía que mana de ellas al fluir.
Cuando estoy en el campo, y puedo mirar al cielo sin que nada, a mi alrededor, me lo impida, también me recreo en todo lo bello que esconde y dejo volar mi imaginación, quizás, a veces, le pongo alas y me deje arrastrar por ellas, es una forma de soñar como otra cualquiera.
Me ha gustado muchísimo esta entrada tuya, estoy de acuerdo en que la belleza del alma y el corazón, permanecen intactas a pesar del tiempo.
Para muestra, no hay más que leerte.
Cariños en ese lindo y tierno corazoncito.
Kasioles
Esto es pura belleza Airblue, como tu canto al Otoño recién nacido al que abrazas y das la bienvenida. Me ha parecido precioso. Un fuerte abrazo y buen fin de semana.
ResponderEliminarTwitter: @Pepe_Lasala
Hola Airblue estoy como una ave fugaz regresando y saliendo con mis escapes por rutas pedregosas, con bellos paisajes, pero para que veas que no te olvido. Espero estés bien amiga y cuidate. Un cariñoso abrazo!~~
ResponderEliminarVenía para agradecer tus letras en mi espacio, siempre me haces sentir arropada con ellas.
ResponderEliminarCariños en el corazón.
kasioles
Antonio:
ResponderEliminarMe alegra saber de ti y sobre
todo que estás bien. Cuídate mucho
amigo lejano.
Abrazos fuertes.