Yo había oído decir muchas veces a mi abuela: "Barrunto que va a cambiar el tiempo". Siempre lo tomaba como una manía pero mi abuela decía la verdad y nuestros mayores lo siguen diciendo porque "barrutan", lo perciben a través de dolores en la muñeca, dolores de rodilla, musculares para generalizar e incluso lesiones viejas, cicatrices y fracturas . Lo había vivido en mi casa, veía que después de decirlo mi abuela, el tiempo cambiaba, a veces se pasaba de un sol tremendo en Burgos a un gran chaparrón . Me sorprendía, "vaya con la meteoróloga, acierta siempre o con un porcentaje muy elevado ".
Más adelante pude comprobar que ocurre lo mismo con los animales, ellos perciben la carga negativa en la que hay más iones .
Mi perro "barruntaba"las tormentas mucho antes de que las coliflores de nubes negras crecieran, recuerdo que se escondía debajo del aparador del salón y no había forma de sacarle.
Mi agapornis Peter era aún más sensible, el pobre padecía problemas neurológicos, le daban ataques epilépticos casi tres días antes de que la presión cambiara, no hacía falta mirar las previsiones meteorológicas, siempre acertaba mi pequeño lorito.
Parece ser que no es ningún cuento de abuelas aquello de “va a cambiar el tiempo porque me duelen las articulaciones”. La explicación se podría encontrar en que la variación de la presión atmosférica afecta a la presión cero que hay en el espacio que se encuentra en nuestras vértebras y que ésta agrave la inflamación que existe en la zona.
El componente “adivinatorio” se explica porque la bajada de la presión de la atmósfera se produce antes de que cambie el tiempo y por ello es posible detectar con antelación un cambio de tiempo.
Por tanto, no es el cambio de tiempo quien influye directamente en nuestro estado de salud, es la subida o bajada de presión.
La presión atmosférica es una constante que cuando varía influye en nuestro
cuerpo de manera significativa. Principalmente incide sobre el aparato
cardiovascular y sistema nervioso central. Por eso, cuando subimos a una
determinada altitud puede aparecer el mal de altura con trastornos
respiratorios, taquicardia, sensación de falta de aire, dolor de cabeza,
pesadez, disminución de la agudeza auditiva y fatiga muscular.
Las personas que padecen migrañas también acusan
especialmente los cambios de tiempo. En el cerebro de los enfermos de migraña hay una alteración de los
mecanismos que se encargan de mantener los niveles bioquímicos del mismo ante
cambios en el ambiente, como pueden ser los cambios en el tiempo, hormonales o
de alimentación.
¿Su ánimo se altera antes de las tormentas? ¿Le duele la cabeza cuando hace mucho
frío? No se trata de supersticiones ni de simples coincidencias. Está
demostrado que el clima influye en nuestra salud.
Los
cambios climáticos nos afectan más de lo que creemos. No sólo influyen en
nuestro ánimo, sino que se ha comprobado que inciden en la salud y en
el bienestar. Si nos duelen las articulaciones en determinado momento y nos permite pensar que está a punto de llover, no es que tenga dotes adivinatorias.
La humedad afecta al metabolismo.
Del mismo modo, no es mera casualidad que nos sintamos llenos de energía cuando
soplan vientos frescos o cuando comienza la primavera. El clima incide en
nuestra salud, en el humor, en la disposición a salir o a quedarnos en casa.
Antiguamente,
los médicos eran conscientes de la estrecha relación entre el clima, la
influencia de la Luna y la salud del hombre. El médico griego Galeno ideó un
procedimiento para diagnosticar, según el cual, ciertos días de cada fase lunar
surtían sus propios y singulares efectos en las enfermedades o tratamientos
médicos.
En el siglo pasado, comenzó a estudiarse con profundidad la relación entre los
fenómenos climáticos y ciertas enfermedades como el glaucoma, los trastornos
cardíacos y circulatorios, cólicos nefríticos y hepáticos y las alteraciones
anímicas, como melancolía, desánimo y angustia. La investigación científica
actual ha permitido confirmar que los cambios climáticos coinciden con el
aumento de las enfermedades denominadas meterotrópicas y con el aumento de
suicidios, crímenes violentos y otras manifestaciones relacionadas con la
conducta y las actividades humanas.
Cascadas, bosques y tormentas
Los entornos naturales ricos en iones negativos
se encuentran junto al mar, en los bosques de pinos o cerca de las cascadas. Cuando se produce una tormenta con relámpagos, es bueno ponerse junto a una cascada por ejemplo para notar la influencia que los iones negativos ejercen sobre nuestro estado de ánimo. Un entorno rico en iones negativos por regla general hará que te sientas relajado pero a la vez eufórico.
"Vientos de Brujas"
Algunas veces la propia naturaleza genera estados ricos en iones positivos y
ello ejerce un impacto extenuante sobre las personas. Los vientos ricos en
iones positivos reciben distintos nombres en las diferentes regiones del
planeta, pero todos ellos presagian problemas. En California reciben el nombre
de vientos de Santa Ana; en Cánada, se llaman vientos de Chinook; en Alemania,
Fohn; en Francia, Mistral y en Israel, Sharav. Estos vientos, ricos en iones
positivos, ejercen una influencia negativa sobre la mayor parte de las
personas, que se traduce en dolores de cabeza, cansancio, hinchazón de las
extremidades, náuseas e incluso en reacciones violentas. Un viento rico en
iones positivos perjudica nuestro sistema bioquímico: incrementa los niveles de
serotonina, lo cual provoca irritabilidad y tensión. Se conocen como
"vientos de las brujas", son muy calientes y secos, producen un
aumento de la temperatura ambiente y disminuyen la presión atmosférica, creando
una alteración del estado eléctrico de la atmósfera.
Estos vientos cálidos producen importantes trastornos fisiológicos,
especialmente en las personas que tienen un sistema nervioso muy sensible. Los
síntomas más característicos son agitación, inapetencia, insomnio, fiebre,
resfriado común, trastornos respiratorios y digestivos, crisis convulsivas,
dolores de cabeza, mareos, irritabilidad y depresión.
A comtinuación una corta lista de enfermedades que acusan los cambios de presión y los fenómenos atmosféricos:
Alergias: Provocadas por el polen y los cambios bruscos de la presión atmosférica.
Angina des pecho: Días de tormenta, paso de frente frío..
Asma bronquial: Paso de frente frente frío con turbulencia, subida bruca de la presión, días de tormenta.
Ataques epilépticos: Descenso de la presión, viento del Sur, días de tormenta, paso de frente frío.
Catarros: Viento caluroso y seco, paso de frente frío.
Dispepsias: Al final de una larga sequía.
Glaucoma: Tormentas de calor, frentes fríos en verano.
Gripe: Paso de frente frío, perturbaciones positivas del campo eléctrico.
Infarto de miocardio: Paso de frente frío.
Migraña: Viento caluroso y seco.
Neumonía: Cambios de presión atmosférica.
Poliomielitis : Frentes fríos consecutivos.
Reúma: Paso de frentes fríos y cálidos, caída de presión, oscilaciones del campo eléctrico.
Suicidios: Paso de frentes fríos y cálidos, viento del Sur, descargas electromagnéticas fuertes.
Trombosis: Paso de frente frío y días de tormenta.
Solo me queda avisar de algo muy importante: Las personas somos lo que pensamos, la mente es tan poderosa que puede influir en nuestro estado físico hasta el punto de somatizar cualquier parte de nuestro organismo. No nos obsesionemos entonces cuando llegue un cambio de estación o veamos el mapa de la previsión meteorológica. Podemos ser como nuestras abuelas, pero sin dramatizar.