Para nada quisiera competir con nuestro amigo Juan y su "Jardín insostenible", eso es muy arriesgado para una aficionada a las plantas y a las flores como yo. Solo me voy a introducir en el agujero del tiempo para contaros una pequeña anécdota, que siempre viene a mi memoria cuando comienzan los efluvios primaverales. Hay recuerdos buenos y malos y éste no es muy grato precisamente.
Por estas fechas comenzaba el festival de capullos que pronto abrirían sus pétalos y yo sabía que las margaritas, los lirios del valle y las amapolas eran los primeros en florecer. Pero había algo que me fascinaba, lo esperaba impaciente todos los años porque podía deciros que era el corazón del jardín, al menos su color rojo granate me lo recordaba. Seguro que más de uno conoce las PEONÍAS. Con el frescor y la humedad de la tierra florecían siempre y en pocos días alcanzaban un tamaño asombroso, de pétalos grandes y muy frondosas alegraban ambos lados del porche y aunque no tenían aroma, puedo asegurar que llamaban la atención a los muchos que se asomaban a verlas.
Pero como en todo espectáculo el decorado cambia y la mala actitud del ser humano sale a flor de piel cuando la belleza molesta. Un mal día al despertar, un alma negra hizo mucho daño a mis preciosas flores arrancando de mala manera todos los capullos y deshojando una por una todas las corolas granates y no contento con ello, con perversidad y alevosía extendió los pétalos por todo el porche, por las escaleras, hasta la entrada del jardín. No podía creer lo que estaba viendo. ¿Qué ha pasado y quién tiene el corazón tan frío para tan desagradable hazaña?.
Lloré todo lo que pude de rabia y de impotencia hasta la mañana siguiente que lo primero que hice fue salir al jardín. Miré a mi alrededor y solo se había salvado una ramita, en el suelo se veían algunos pétalos con gotitas. No eran de rocío, no, eran las lágrimas de mis peonías.
Las plantas son seres vivos que no sienten dolor, no tienen sistema nervioso, pero sí son capaces de responder a estímulos negativos. Quien lo hizo tampoco sintió dolor.
Me alegra ver que ya estas bien, como este Blog sigue activo, con el mismo interés de siempre. Imagino el disgusto que te llevarías al ver los pétalos por el suelo.
ResponderEliminarLas Plantas son seres vivos que en Primavera nos regalan sus preciosas Flores, o sus mejores brotes, siempre he pensado que notan quien las cuida con cariño y digo esto, porque es normal encontrar a quién le gustan las Plantas,y como florecen y crecen en jardín o macetas, y al revés, cuando no gustan,
por mucho que uno se empeñe no salen adelante, a veces pienso si notan las Vibraciones de quien las cuida. Un Abrazo
Sí que es triste la historia, y contada con una sensibilidad muy especial. En mis paseos por el campo (yo sí tengo la suerte de vivir en plena sierra, y aunque tiene sus inconvenientes también, me siento muy agradecida) voy disfrutando de las flores y me gusta fotografiarlas pero soy incapaz de cortar ninguna
ResponderEliminarUn abrazo.
Se te echaba de menos Airblue, no sabía el porque de tu ausencia. Te deseo lo mejor amiga. La historia que nos compartes aún en su tristeza, lo has descrito de forma muy bella, con dulzura, como se merece la naturaleza, Tu jardín te ha inspirado bellamente. Y sí, responden a estímulos negativos, y al Amor hacia ellas. La mala acción del ser humano no tiene perdón. Me ha encantado leerte amiga, tienes mi aplauso por esta bella y triste historia. Un besazo Airblue.
ResponderEliminarTodas las primaveras nos alegra la vista la explosión floral en nuestro entorno. En Madrid tenemos varios parques donde podemos ver todo tipo de plantas y flores. También un Jardín Botánico y dos rosaledas.
ResponderEliminarEs una pena que haya personas que sean capaces de destrozar tanta belleza.
Abrazo.
A mí me pasó lo mismo con una planta que dejé en el portal. Mala gente. Un beso
ResponderEliminarLo más importante y que me alegra es ver de nuevo activo tu blog y que lo vas superando...
ResponderEliminarLo complementa el colorido precioso y diverso de esas maravillosas plantas.
La maldad hace presencia con frecuencia, destroza y mata la belleza de la naturaleza.
Lo has descripto con toda claridad.
Un fuerte abrazo, guapetona.
Desalmados hay legión... Ya ves que mal le hacían las flores. Pero abortos de Satán que se dedican a maltratar animales o arrasar lo bello para poner su firma criminal y analfabeta en el tallo cortado de una flor hay en demasía...
ResponderEliminarUn abrazo
Un día vi un reportaje de un informe en el que se decía que las plantas cuando ven que alguien se acerca con unas tijeras en la mano, tiemblan. Lo acompañaban con las pruebas científicas que lo avalaban. Por lo menos es curioso y quién sabe si cierto.
ResponderEliminarSAludos.
Airblue, la naturaleza ve la maldad del ser humano, sufre y calla en silencio...Las flores son auténticos regalos de belleza, que nos animan a seguir adelante y nos llenan el alma. Todo tiene un sentido y no nacen porque sí, tienen su finalidad y la cumplen con verdadera entrega y humildad...Nos hablan, nos susurran, nos gritan y hay que cuidarlas. Lo bueno y lo malo tiene su repercusión y su respuesta...Imagino tu dolor ante esos "pétalos rotos, agonizantes, Airblue...Espero que sigas cuidando tus flores y que ellas te sigan inspirando y dando fortaleza, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz primavera.
Estimada amiga, tu sentir y gran sensibilidad queda patente en tus letras, las competiciones a veces son odiosas, pero tus palabras demuestran un latir muy profundo hacia la belleza de la propia naturaleza y eso no se puede crear ni explicar, sino que se nace con ello. Esa despreciable persona que acometió tan graves daños, seguro que tenía una mente enloquecida y contraria al amor y al significado de cuanto representa ese don que brota mansamente de la tierra y hace vibrar nuestros corazones; personas de esa calaña son maestros en hacer el máximo de daño posible al prójimo y a todo cuanto de belleza pueda significar y ofrecer la Madre naturaleza.
ResponderEliminarMe alegro enormemente de tu recuperación y te deseo todo lo mejor estimada amiga.
Recibe un gran abrazo.
Es incomprensible hacer daño, pero sobre todo cuando es un daño inútil, del que no se saca nada de provecho. Me gustan las flores, las plantas verdes más pero no soy buena jardinera. Un abrazo, ya te dejé uno ayer pero para ti todo es poco
ResponderEliminarNunca entenderé la maldad del ser humano.
ResponderEliminarEs una historia muy lamentable.
Ante algo así, ya imagino tu sufrimiento.
Un abrazo fuerte.
Nunca entenderé como puede haver personas con tan mala conciencia. Cuídate amiga.
ResponderEliminarAbrazos.
Te abrazo con todo mi cariño, para celebrar que has vuelto a escribir y para consolarte en ese recuerdo tan triste y doloroso. Te comprendo perfectamente, Yo también amo demasiado la vida de cualquier ser.
ResponderEliminarTe quiero 💕 preciosa amiga de ojos azules y muy sanos. Sigue bien siempre.
Ten por seguro, que el alma de quien hizo esta masacre en tu JARDÍN, se irá secando, como estos pétalos que deshojó y repartió por doquier; y aún más te digo; cada vez que vea un rosal, una ROSA sea del color que sea su VERGUENZA INTERIOR, asomará en lo más profundo, en lo más escondido de su SENTIR, y le recordará que tiene que alejarse de tanta BELLEZA, para no recaer; porque la CULPA es invisible, pero se hace notar.
ResponderEliminarUN ABRAZO AMIGO, ¡¡¡A CULTIVAR ROSAS SE HA DICHO!!!
Conxita tedeternura. ^:^