Voz de mi hija.

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lunes, 5 de diciembre de 2016

Hoy toca salud.


   Llega el frío y con él los dichosos resfriados, gripe y demás disfunciones respiratorias. Además el tiempo nublado y con menos horas de sol tiende a agravar los problemas depresivos y ansiosos, si encima el ritmo cotidiano lleno de prisas nos lleva a estar más estresados, solemos acudir a remedios que en contra de lo que parece, no sirven ni surgen el efecto deseado.

¿Quién no ha escuchado alguna vez el consejo de “tomar suplementos vitamínicos en las épocas de más estrés”? Es una de las indicaciones que vemos en la publicidad de los complejos vitamínicos, como si con ello se redujeran o eliminaran los síntomas asociados. ¿Es así? ¿Realmente necesitamos de estas pastillas vitamínicas para afrontar el día?
El sabio consejo de nuestras abuelas “come de todo” es básico para “sobrevivir” en el día a día, en cualquier época del año. Quien no dedica tiempo a una alimentación adecuada, carece de vitaminas básicas para desarrollar su vida con optimismo y energía.
Las vitaminas son sustancias químicas que se encuentran en pequeñas cantidades en los alimentos y son necesarias para la vida, la salud, la actividad física y para nuestro día a día.
Hay vitaminas vinculadas a componentes grasos de los alimentos, (liposolubles) y otras vinculadas a los líquidos (hidrosolubles). Entre las primeras, están las vitaminas A, D, E y K. En el segundo grupo se encuentran las vitaminas B1, B2, B3, B6, B12 y C.


Y cuál es la función de las vitaminas?, pues transformar los alimentos en energía, mantener en buen estado el sistema nervioso, mantener el sistema inmune aumentando las defensas, ayudar a un buen funcionamiento de nuestros neurotransmisores y todos sus componentes, son antioxidantes, mejoran la visión, son antibacterianas, protegen de enfermedades cardiovasculares,… Podríamos seguir así unos cuantos párrafos más, enumerando sus propiedades y beneficios para el sistema y todo con una finalidad: todo nuestro rendimiento físico y mental depende de ellas y, por supuesto, de una buena alimentación.
El ritmo de vida, el estrés y otros factores externos como el tabaco, café, té, alcohol y una determinada manera de cocer los alimentos en exceso, hace que las vitaminas no cumplan su función y pensamos, ante su carencia, que los complejos vitamínicos nos pueden ayudar. Pero ¿es realmente así?

 La dosis diaria de vitaminas que nuestro cuerpo necesita es de apenas un miligramo. Y como es inteligente, toda aquella dosis extra que no le hace falta, la excreta. Por ejemplo, la vitamina A es buena para la vista o para el crecimiento, tomada en exceso provoca náuseas y dolor de cabeza. Lo mismo ocurre con la vitamina D, buena para la absorción del calcio y formación de huesos, que en exceso puede producir calambres. Los aportes suplementarios solo deben estar indicados por un médico y en algunos casos son necesarios, por ejemplo, la B9 como suplemento de ácido fólico para las mujeres embarazadas, pues ayuda a la formación del sistema nervioso del feto.

Todos sabemos que el estrés es una consecuencia de un ritmo de vida que no somos capaces de soportar y la solución no es tomar vitaminas, sino reducir las vivencias que más ansiedad nos provocan, descansar y dormir las horas que nuestro cuerpo necesita para recuperar energía. La verdad es que cuesta mucho coger el sueño cuando las preocupaciones nos agobian, lo ideal sería desconectar cuando estamos en casa, si el trabajo es el culpable, y si no lo es, ayudarse con tisanas y procurar pensar en algo que nos guste, en algo positivo.

Y es vital mejorar nuestra dieta, comiendo de todo en la proporción correcta especialmente verduras, frutas y legumbres y si creemos que nos irían bien algunas vitaminas de más podemos obtenerlas de los alimentos que las contienen.
Os dejo una serie de alimentos beneficiosos para el cuerpo y acordes con la estación en la que nos encontremos:

  
    . Aguacate: rico en vitamina E, cuidará tu piel (más expuesta a los rayos de sol) y un excelente acompañante de ensaladas fresquitas.
  • Sardinas: Ricas en ácidos omega 3, son cardiosaludables.
  • Frutos secos: como nueces y avellanas, los primeros también ricos en ácidos omega 3 y los segundos en Vitamina E.
  • Sandías y melones: ricos en vitaminas C y A.
  • Tomates: ricos en vitaminas A, B, C, E y K. Uno de los mejores alimentos para el verano, además contiene antioxidantes y carotenoides, protectores del desgaste celular y del corazón.
  • Zanahorias: con antioxidantes y vitamina A, E y K, con abundante betacaroteno que protege tu piel y te ayuda a tener un tono más bonito en verano.

Ya sabes, mejora tu alimentación y mejorarás tu salud.
Hay veces que necesitamos vitaminas, pero para el alma.

20 comentarios:

  1. Mi abuela sin, conocimientos médicos, defendía que la comida era la mejor prevención, y que al estomago no se le podía engañar porque te lo sacaba a la cara. Hay que comer de todo, y evitar los medicamentos aunque se llamen vitaminas, ahora después de leerte aun estoy mas convencida. Un abrazo agradecido y contento

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    1. Tu abuela como todas las abuelas eran sabias y sus dichos y hechos son magistrales. Se suele decir que comiendo no hay mal que valga y comiendo un poco de todo es una buena garantía de salud.
      Las vitaminas nunca kan sido milagrosas.
      Abrazos saludables.

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  2. Me va tu entrada, porque fíjate que justamente me encuentro resfriada y hoy ha sido de lluvia todo el día y está muy frío afuera. La lluvia lo hace sentir más, tú sabes. Anduve fuera durante la mañana/tarde. Y ansiaba regresar a meterme a mi camita. No soy de ingerir suplementos alimenticios, ni medicamentos, ni vitaminas, porque soy de muy buen comer, más bien algo glotona, jajaja. Y no creas que soy gorda, eh! Pero procuro ingerir lo más nutritivo posible. Y creo que no hay alimento que no me guste. También pienso que esa es la mejor manera de abastecernos de lo que necesitamos. Las vitaminas son un gran negocio de las farmacéuticas. Asimilamos mejor desde las frutas que en píldoras. Aunque también hay que reconocer que los frutos de la tierra, no son igual que antes y lo 100% orgánico, es bastante caro.
    Hoy no te abrazo ni te beso, porque te contagiaría. Pero te expresó mi cariño con palabras azules y de anís.

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    1. Ya sabes que los resfriados se previenen con vitamina C, pero mejor un buen zumo de naranja que una pastillita. Come de todo pero poca cantidad, se dice que hay que levantarse de la mesa antes de saciarse, así se digiere mejor y mantenemos la línea.
      Te manda un zumo de frutas aromatizado con anís y un abrazo.

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  3. Te doy toda la razón.
    Soy tu msma pinión.Co los alimentos naturales, n ohay nada y no te hacen daño.


    Me he llevado, muchos años cuando era mas joven, cenandoo dos o tres huevos revueltos con patas, poco hechos.
    Es mi plato preferido. Hoy quien me los hace como a mi me gustan es mi hijo Fernandoo y de sal, que esten salerosos.

    Así que de pastillitas vitamínicas y que me perdone mi nuera Farmacéutica. Noo creo en ellas.
    De acuerdo en todo tu escrito .
    Que bien te expresas.

    manolo
    .

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    1. Manolo, a mi también me gustan los huevos revueltos pero con poca sal, lo siento pero no te conviene, ya sé que bajar la sal cuesta, yo no tengo necesidad y me la quito muchas veces por salud y para vigilar mi peso. Mi rodilla es lo primero.
      Tu hijo Fernando es un sol. Dale recuerdos.
      Cuídate mucho.

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  4. Una clase magistral como muchas veces nos ofreces y nos tienes acostumbrado :)
    Yo me pregunto ¿Quien asesoraría a los descendientes de Adán y Eva, que además tenían el problema lógico de la consanguinidad ya que tenían que reproducirse entre hermanos padres e hijos, curiosamente sin que fuera pecado? O este de Adán y Eva es uno mas de los cuentos y mentiras cono los que nos educaron con temor al pecado para que la iglesia de turno ejerciera su poder sobre nosotros? Lo malo de esta practica tan común en las regiones para someter por ignorancia, es que en cuanto pudimos pensar libremente y llegar a conclusiones lógicas y evidentes por nosotros mismos, no tuvimos mas remedio que como mínimo volvernos agnósticos o incluso ateos recalcitrantes en la actualidad.
    Muy buena entrada, perdona que me saliera de tu tema central pero me pongo a pensar y la imaginación vuela...jajaja
    Besos y salud

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    1. Aunque te has ido del tema, te diré que ya entonces Eva comía manzanas, muy saludables y sanas, ja,ja,ja, Sí, cuando ya uno piensa todo suena a paradoja y cuesta creerlo.
      Tú de momento come fruta y verdura del campito y de vez en cuando un buen bistec para darle gusto al ácido úrico.
      Fa,ja,ja.
      Manzanitas verdes para vos, señot.

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  5. Quería decir, "práctica tan común en las religiones", perdón.
    Besos y salud

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  6. Es fundamental una alimentación sana.
    No soy de tomar medicamentos.
    Quizás tomar un poquito de todo con precaución y,por supuesto, sin faltar fruta y verduras.

    Magnífica información.

    Un beso.

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    1. Los medicamentos son como los bomberos, apagan el fuego, pero destruyen la casa.
      Comer bien no creas que todo el mundo sabe, habría que enseñarlo en el colegio como una asignatura más.
      Gracias Amalia, un beso.

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  7. Muy buena entrada! Creo que lo principar es tener una buena relación con tu cuerpo, y a veces no esta demás hablar con nuestro cuerpo, para que nos de las pausas a seguir. No soy de vitamina y los medicamento los necesarios.
    Un cariñoso abrazo

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    1. Mejor un plato de fruta variada que pastillas de colores. Solo cuando sea necesario. Tú que relacionas muy bien cuerpo y mente, sabes que una buena alimentación es necesaria para que ambos funcionen.
      El amor, la mejor vitamina para el alma.
      Un abrazo Cristina.

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  8. Gracias por tan buenos consejos. Un beso.

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    1. Y gracias a ti por aceptarlos. Un abrazo.

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  9. Soy más de cuidar los alimentos del alma que los del cuerpo. Debería hacer más caso a una buena alimentación, pero a estas alturas, me costará cambiar de hábitos. Se agradece tan variada y buena información.

    Abrazos

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    1. Si admites un consejo, se puede cambiar si lo intentas, la salud se va minando con los años y sin darse uno cuenta de repente salen los típicos achaques, colesterol, triglicéridos, glucosa, ácido úrico... etc, etc, y desde ese momento te lo llevas colgado al hombro per secula seculorum. Prevenir es curar, amigo, un buen bocadillo de calamares de vez en cuando no hace daño a nadie, lo peor son los malos hábitos que se convierten en costumbre. Cuídate para poder cuidar a los demás, eso me dijeron cuando perdí a mis padres en cinco meses, me destrocé psíquicamente y sabes que todo luego se somatiza.
      Una cervecita??? ja,ja.

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  10. YO NECESITARÍA VITAMINAS PARA EL CUERPO Y PARA EL ALMA, DE TODO NECESITO... LA VIDA ES DURA A VECES Y TODO PASA POR LA ALIMENTACIÓN Y POR LAS EMOCIONES. EXCELENTE PUBLICACIÓN, MUY INSTRUCTIVA.
    BESOS ENORMES

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    1. Lo cierto es que lo necesitamos todos.
      Ánimo mi querida amiga.

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  11. “La Navidad es la temporada para encender el fuego de la hospitalidad en el salón, y la genial llama de la caridad en el corazón“ Washington Irving
    Feliz Navidad y mi cariño. Volveré en el 2017 superando este parón. Gracias por estar siempre.
    Un abrazo

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