Voz de mi hija.

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viernes, 3 de noviembre de 2017

El poder del ahora




Muchas veces durante el tiempo que llevo escribiendo en este blog, he hecho alusión a temas relacionados con la mente y siempre repito lo mismo, que puede llegar a ser el peor enemigo del ser humano, debido a la fuerza y al poder que ejerce sobre nosotros. La expresión en el latín clásico "Mens sana in corpore sano", cuya traducción es " Una mente sana en un cuerpo sano", está extraída de uno de los poemas satíricos escritos por el autor romano Décimo Junio Juvenal, entre los siglos I y II d. Cristo.
Concretamente pertenece a la Sátira X (línea 356) en el que la frase entera dice:
‘Orandum est ut sit mens sana in corpore sano’
(Debemos orar por una mente sana en un cuerpo sano)
Mantener el equilibrio perfecto entre cuerpo y mente podría compararse al acierto de conseguir el bienestar y la felicidad durante toda nuestra vida. El momento presente a veces es desagradable, inaceptable y horrible. Es como es.
Si te fijas, tu mente le pone una etiqueta y en este proceso de etiquetar, ese continuo juicio, nos crea dolor e infelicidad.
Estamos en tiempo de reflexión, el calendario nos recuerda lo efímera que es la vida dedicando unas fechas donde la muerte es la principal protagonista. No hay que tener miedo a morir, sólo hay que saber aprovechar la vida manteniendo un cuerpo cuidado y una mente bien clara, sin velos que la oscurezcan. Es importante observar la mecánica de ésta y sus patrones de resistencia, para poder permitir que el momento presente sea. Se trata de lograr sentirnos internamente libres de todas las condiciones externas, y probar el estado de verdadera paz interna. Después observar qué ocurre, y actuar si es posible y necesario.
Aceptar y después actuar. Aceptemos cualquier cosa que contenga el momento presente y trabajemos a favor de ese momento, no contra él. Hagamos del presente nuestro amigo y aliado, no nuestro enemigo. Cierto es que si lo logramos podríamos transformar nuestra vida.
Un ejemplo sería el dolor que sufrimos de niños, este dolor acumulado es un campo de energía negativa que se aloja en ambas partes. Se conoce por cuerpo-dolor emocional. Todos hemos padecido alguna vez dolor emocional. Si lo has sentido ¿cómo lo has solucionado?. Muchas son las personas que acuden a un psicólogo cuando ellas mismas no pueden con ello, pero es importante hacer un esfuerzo por poder solventar nuestros problemas nosotros mismos. No hay mejor psicólogo que uno mismo.


Igual esta entrada os parece un poco complicada, o un tanto liviana, voy a resumir:
Enfoquemos la atención en lo que sentimos dentro de nosotros. Identifiquemos el cuerpo-dolor, lo que nos hace daño, y aceptemos que está ahí. No pensemos en él, ni juzguemos ni analicemos. Solo hay que mantenerse en el presente, ser capaces de estar alerta, observar lo que sentimos por dentro en lugar de vernos arrastrados por ello. Un intenso ejercicio espiritual que permite una rápida transmutación de todos los dolores del pasado.

La entrada está basada en el libro "El poder del ahora" de Eckhart Tolle.
Una respuesta a la urgente necesidad de nuestro tiempo: la transformación de la consciencia y la aparición de una humanidad más iluminada.
Difícil pero no imposible.

Airblue


19 comentarios:

  1. Siguiendo con el tema encontré este escrito:

    Carpe diem es una expresión de raíces latinas que fue concebida por el poeta romano Horacio. Su traducción literal otorga relevancia a la frase “cosecha el día”, cuyo contenido intenta alentar el aprovechamiento del tiempo para no malgastar ningún segundo.

    Carpe Diem
    La frase completa popularizada por Horacio, aseguran los historiadores, fue “carpe diem quam minimum credula postero”, que en español puede entenderse como el siguiente consejo: “aprovecha cada día, no te fíes del mañana”.

    Esta frase aparece en libros, películas, etc. y tiene que ver con lo que aparece en tu entrada.

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    1. Sí van unidas. Importa el hoy, no el mañana y el pasado ya es historia.
      Gracias por comentar.

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  2. A mi no me preocupa la muerte, ya tengo bastantes años como para ir acostumbrándome al dicho de que "A cada cerdo le llega su San Martín" jajaja Me encanta este dicho, aunque tiene mas el significado de que tarde o temprano el que la hace la paga. Lo que si me importa es el "como" se llega a la muerte, eso reconozco que me quita el sueño, porque las puede pasar uno muy canutas hasta estirar la pata, en fin, mejor no pensar en ello, será lo que tenga que ser...
    Besos y salud

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    1. Tú te lo dices todo, amigo. A mí no me importa morirme, lo que no quiero es saber que me muero, ya ves, ahora la medicina no te oculta nada y te aseguro que en este caso es mejor ser ignorante, cuanto menos sepas más feliz y eso que es mejor prevenir que curar.
      Abrazos azules con salud.

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  3. Hay que asumir que algún día nos tendremos que ir. A mi me entristece aunque reconozco,que tiene que ser así,

    Vivir el presente y saber afrontar lo que la vida nos depara cada dìa.

    Muy interesante y reflexivo tu escrito.
    Un beso.

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    1. Tú lo has dicho, vivir al día. Llega un momento en la vida que el futuro es corto, los años mandan y tener paz interior ayuda al cuerpo y a la mente.
      Gracias Amalia.

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  4. No es imposible, somos capaces de lograrlo. Hoy toca reflexionar sobre tus palabras y decidir y desde luego la mejor opción es vivir sabiendo que somos maravillosamente efímeros. Puede ser de mucha ayuda lo que hoy has escrito por ello te mando un abrazo agradecido y por tu recuerdo hacia Manolo te mando otro abrazo

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    1. En estas fechas suelo reflexionar mucho, pienso en lo corta que es la vida, en lo que no voy a tener oportunidad de hacer y en lo que podría haber hecho por mis seres queridos en el pasado. La mente enferma mucho antes que el cuerpo y eso está comprobado.
      Un gran abrazo.

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  5. Todos los días de vida debemos escuchar nuestro interior... si no lo atendemos, nos puede hacer pasar muy malas experiencias. Puede que el entorno ser un desastre, pero de nosotros depende estar en armonía, comprender que hay cosas, situaciones, incluso vidas que no podemos cambiar, por más que lo deseemos. Es más, desearlo no nos está permitido, porque cada quien tiene sus procesos personales y su camino y su misión. Con que logremos el propio ya es suficiente y una victoria grande. No hay que tenerle miedo a la muerte, sino vivir con toda intensidad cada día que Dios nos conceda estar aquí y amar mucho. Y que venga la muerte cuando quiera. Cuando concluya nuestro paso por el mundo.
    Muchos besitos de anís, preciosa Airblue. Un placer saludarte en tu casa tan acogedora siempre.

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    1. Me has entendido perfectamente, Sara, lo has explicado mejor que yo.
      Escuchar lo que nos dicta el interior y quedarnos con lo bueno, es lo importante para tener salud mental y emocional.
      Besos anisados.

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  6. Hola, yo tengo bien asumido que un día me iré, eso no me asusta, lo que sí me importa es el cómo. Me enseñaron en casa que la vida había que vivirla intensamente y con honestidad y que Dios nos la haga larga o corta, lo importante es lo que hagamos mientras nos dure...
    Una entrada muy interesante.
    Te sigo desde hace tiempo.
    Saludos.

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    1. Te contesto lo mismo que a Genin, el segundo comentario.
      Sé que me sigues, muchas gracias sevillana.
      Un abrazo.

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  7. Hola Airblue, una entrada para la reflexión y para tener presente. Para vivir en el momento presente hay que dejar muchas cosa de lado, y tener una mente abierta hacia nuevos horizontes. La vida nos fue dada para ser felices y vivir en plenitud, con lo que tenemos y con lo que somos en el aquí y en el ahora.
    Con amor y luz.
    Namasté

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    1. Tú también has captado muy bien mi mensaje. Tiempos de reflexión para llevar mejor lo que nos quede por vivir, mirando nuestro interior y desechando lo que nos hace daño. La vida es un suspiro, Cristina.
      Namasté.

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  8. Me gustó tu blog,saludos.

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  9. Espero que tu tristeza ya se haya disipado. O que tus vibraciones altas ya sean más potentes que las bajas.
    * Vine a ver cómo estás y a dejarte cariño... que este fin de semana será muy bueno y debes estar lista para apreciarlo.

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  10. Estoy mejor, Sara, gracias por preocuparte. El miércoles pasado estuve en el cementerio, llevé flores a mis tres seres queridos, mi madre, mi padre y a mi hermano que se fue con 19 años. Es duro y vuelvo muy triste. Luego mis dos hijas me arropan ellas son lo más grande que tengo.
    Y con amigas como tú, no hay tristeza que dure, aunque sea en la distancia.

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  11. Estoy mejor, Sara, gracias por preocuparte. El miércoles pasado estuve en el cementerio, llevé flores a mis tres seres queridos, mi madre, mi padre y a mi hermano que se fue con 19 años. Es duro y vuelvo muy triste. Luego mis dos hijas me arropan ellas son lo más grande que tengo.
    Y con amigas como tú, no hay tristeza que dure, aunque sea en la distancia.

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