Pensé que no podía... y no pude
Creí que no sabía nada... y nada supe
Pensé que no tendría fuerzas... y flaqueé
Creí que era demasiada la carga... y me caí
Subestimé mi capacidad... y no fui capaz.
Luego aprendí...
Que si creo que puedo, puedo
que sé más de lo que ni siquiera imagino
que tengo las fuerzas que decido tener
que no hay carga que mis hombros no puedan soportar y
que puedo llegar a donde yo me lo proponga.
Pues claro.
ResponderEliminarBesos
Bien por el intento.
ResponderEliminarBesos.
A veces subestimamos,nuestras capacidades, talento, esfuerzos, lo vemos todo cuesta arriba. Pero es increíble lo Fuertes que podemos llegar a ser, las capacidades que afloran cuando las necesitamos. Situaciones que pensamos,se nos hacen un mundo, pero,un día nos llega de golpe sin esperar, y algo se activa en nuestro interior, superación, esfuerzo, salimos airosos y con orgullo al ver lo conseguido.
ResponderEliminarUn Abrazo
Suele pasar y no una vez ni dos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
El poder de nuestra mente es enorme, si pensamos que no podemos, sin dudas no podremos aunque estemos capacitados para hacerlo y si nos ponemos positivos seguro que haremos todo y más también, saludos.
ResponderEliminarPATRICIA F.
Eso es, la peor gestión es la que no se intenta. Cuando lo hagas, hazlo con empeño, esa es la fuerza que se necesita....
ResponderEliminarBesos.
Pues sin duda, un gran aprendizaje que has sabido contar con mucha sensibilidad.
ResponderEliminarBesitos.
Muy buen texto. Un beso
ResponderEliminarA veces es el miedo al fracaso lo que nos paraliza. Y es bueno saber que si uno cae siempre puede volverse a levantar y empezar a caminar de nuevo... Todo dependerá de las circunstancias y el entorno que nos envuelva y proteja...
ResponderEliminarAbrazo
Muy buena reflexión, Airblue. La vida nos pone a prueba muchas veces y ello hace que ejercitamos la paciencia, la constancia, la valentía, la fe y la esperanza, que son fundamentales para lograr ese equilibrio interior, que nos hace resistir y superarnos.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y mi ánimo siempre, compañera.
Es bueno tener un poquito de temor, ser demasiado valientes nos puede derrumbar. Somos alumnos y la vida el maestro. Para reflexionar. Un beso Airblue
ResponderEliminarCon il tempo la vita ci insegna e si impara, cadere è umano credo sia necessario per raggiungere la consapevolezza della nostra forza, dei nostri limiti. Un bellissimo pensiero ed il mio saluto
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EliminarÈ vero. Grazie mille per le tue parole
Una gran lección y buena reflexión.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Una muy buena reflexión amiga, y por supuesto todo aquello que te propongas lo puedes conseguir, el ser humano en ciertas situaciones es mucho más fuerte de lo que podamos imaginar.
ResponderEliminarUn gran abrazo y feliz resto de semana.
Siempre que seamos realistas. Yo el maratón, por ejemplo, pues va a ser que no.
ResponderEliminarAirblue, gracias por repetir comentario. Siento que blogger no lo recogiera, amiga...Vuelvo a leer tu post lleno de fortaleza y sabiduría y te diré que tiene la misma esencia que una frase, todo un lema para mi muchos años: "La vida empieza cada día".
ResponderEliminarSi, los hijos nos renuevan y nos dan nueva vida...Mi hijo, que lleva 12 años en Australia, volverá a España(definitivamente) el próximo año, si Dios quiere y también podré ver a mi nietecita Sofía, que ya tiene 7 años. Ello es una gran alegría, después de dos años de pandemia. La vida nos prueba, pero también nos compensa.
Mi abrazo agradecido y espero que sigas con buena salud y buen ánimo, Airblue.
Aprender algo tan valioso es lo máximo!!!
ResponderEliminarMil besitos de anís.