Fría noche de enero, solitarias calles en las que el brillo de la escarcha anuncia un amanecer helado. Veo el techo de los coches cubierto con una boina mojada y aún queda algún resquicio de luz en las casas. Tengo derecho a quedarme despierta hasta altas horas de la madrugada, nadie va a marcarme el tiempo de sueño, a nadie le importa si duermo o vigilo, entre otras cosas porque el silencio del momento me hace sentir bien, mejor de lo que esperaba, teniendo en cuenta hasta donde hoy llega mi pensamiento.
Abro la ventana de mi invierno, la fría ventana de cristales helados, de colores desvanecidos por el tiempo. Son horas de escalofríos y destemplanza, de imágenes color sepia que siguen vivas en el álbum del recuerdo.
Abro la ventana de mi invierno, la fría ventana de cristales helados, de colores desvanecidos por el tiempo. Son horas de escalofríos y destemplanza, de imágenes color sepia que siguen vivas en el álbum del recuerdo.
Hace frío y me arropo con las sombras de la noche doblando su manto negro y temblando me cobijo al lado de la luna. Una luna abrigada con capa de lana que templa los más mustios sentimientos. Hoy no veo estrellas, el velo de la noche no me deja. Me conformo con mirar la belleza de los sueños.
Fría noche de enero, demasiado fría.
Con ese derecho a permanecer despierta, te fundiste con la noche, para juntas transitar por ese recuerdo, que fue el puente hacia tus sueños.
ResponderEliminarUn abrazo grande!
Una noche en la que mis sentimientos se congelan. Hay noches que siempre se repiten cuando la ocasión lo requiere.
EliminarLindo tu comentario, querida Sara.
Fria noche.
ResponderEliminarRopa de abrigo.
Invierno.
Amanece.
Fríos sentimientos, arropo el alma y espero ansiosa un nuevo día.
EliminarEse derecho por el que peleas desde siempre, esa noche que acompaña en silencio y permite espacio amplio para los pensamientos ajenas a la vida cotidiana, recuerdos color sepia. Hoy he sentido ganas de preparar un café caliente y echar por los hombros una manta azul. Abrazos de los que recolocan el alma
ResponderEliminarHay fechas que hielan el alma y solo encuentras el calor que necesitas refugiándote en la soledad de la noche.
EliminarGracias por esos abrazos.
Claro, ya sabes que yo soy un noctámbulo empedernido, pero como yo hago, mira la noche desde lo confortable de tu hogar, no te expongas al peligroso frío de la madrugada, cuídate mucho... :)
ResponderEliminarBesos y salud
La noche es compañera de muchos recuerdos, Genio, durante el día no tengo tiempo de revivirlos y hay fechas que hielan el corazón.
EliminarCuídate tú también, amigo.
Nada mejor que taparse en una noche así. Un beso.
ResponderEliminarPero dime,¿cómo se tapan los sentimientos...?
EliminarUn abrazo.
Hola Airblue, el frío gélido te invita a acurrucarte en una manta junto al hogar y dejar vagar tus pensamientos.
ResponderEliminarBesos.
Hay noche demasiado frías en las que me gustaría arropar el alma.
EliminarUn abrazo.
Noches de enero sombría larga, fría, temblando ausente bajo la luna…Silencio arropado en las sombras el alma sueña bajo el recuerdo…
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Tú lo has entendido muy bien. El silencio es el mejor compañero y a veces se necesita un poco de soledad.
EliminarFue muy fría la noche.
Gracias.
Compañeras de la noche cuantas por los mundos andaran
ResponderEliminarEn invierno arropados hoy yo por aca simplemente en ropa livian el calor lo amerita
Y......sin estrellas....por algo hoy no las puedo ver
Cariños
Cuántas veces te he leído y cuántas he dejado escapar un comentario. Hoy has sido tú quien lo ha hecho. Muchas gracias.
EliminarEl frío se soporta mejor con tus palabras.
ResponderEliminarY en las noches tristes se agradecen las tuyas.
EliminarA pesar de las noches que hay, es bello permanecer despierto y dejarse llevar por los sueños hacia esa paz en que nos envuelve la noche.
ResponderEliminarMe ha gustado conocerte.
Besos
Fría o no la noche es mágica, y arropada o no, te lleva al país de los sueños.
EliminarGracias por venir. Un abrazo.
Con ese derecho, eres dueña de ese espacio, tu y el silencio. Cuando tu corazón te invitan a ese silencio calmado, es por consiguiente, una actividad que se sitúa más allá de los cinco sentidos, más allá del sentimiento e incluso del pensamiento. Cuando se alcanza esa región del silencio, se nada en un océano de luz plena y verdadera. Y la noche deja de ser fría, para convertirse en noches cálidas.
ResponderEliminarUn cálido abrazo de luz, para arropar tus noches frías.
Necesito el silencio para escribir, para pensar, para recordar y para encontrar esa luz de la que me hablas y por ello vago por las noches, aunque me quede helada. Ese frío jamás traspasa el alma.
EliminarGracias Cristina.
Arropar el frío del alma es un poquito más difícil. Pero el calor del cariño y la amistad ayuda bastante.
ResponderEliminarYo te doy mi caluroso abrazo y, por supuesto, mi sincero afecto.
Tú siempre vienes a mi noche con cariño, Amalia, gracias por tu amistad, es recíproca.
EliminarUn abrazo.
Hola, vengo del blog de Sara. Dice que tus letras son muy bellas, y he comprobado que es verdad.
ResponderEliminarUn placer conocerte.
Besos.
Sara es muy amable y ha tenido un detalle precioso. Gracias por venir a mi sitio, me alegro que te haya gustado.
EliminarUn abrazo.
Vaya prosa bonita Airblue; la verdad es que da calor a este frío. Enhorabuena.
ResponderEliminarP.D.: Perdona mi tardanza en venir, pero he estado ocupado preparando una serie de entradas hechas de forma distinta a la habitual (para que me conozcáis tod@s un poquito más) que ya he empezado a publicar. Un fuerte abrazo y buen fin de semana.
Gracias Pepe, eres muy amable. Me pasaré por tu blog en breve, seguro que será interesante.
EliminarFuerte abrazo también para ti.
Vengo de casa de Sara, que te ha dedicado un precioso y tierno escrito.
ResponderEliminarLeyéndote así como tan triste y helada y a pesar de eso, con tan hermosas letras, comprendo que se introdujese en tus sueños para arroparte.
Besos.
Un bonito detalle el de Sara y otro muy agradable el tuyo por venir a visitarme. Te conozco del blog de Ester y tu poesía de la rosa me encantó.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus amables palabreas.
Abrazos.
Con el frío, la noche cerrada y el silencio, pese a que los recuerdos parece que se quieren congelar, nosotras tratamos de reavivarlos con los sueños.
ResponderEliminarCon tu prosa, hoy has logrado un maravilloso poema, a mí, toda tu entrada, me ha parecido un verso.
Noches de insomnio se repiten muy a menudo en mi vida, en ellas, es necesario despertar a los recuerdos, no podríamos vivir sin ellos.
Cariños en abrazos.
kasioles
Gracias.
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