Voz de mi hija.

Voz de mi hija.

domingo, 5 de marzo de 2017

SOLEDAD



Contemplemos el ocaso, o mejor el anochecer. Nada más relajante que el brillo de una estrella y su reflejo en el mar. Cuando la noche se acerca para muchos es un momento agradable, sinónimo de descanso y tranquilidad, en cambio otros cierran las ventanas y la única puerta que pueden abrir es la que conduce a la soledad más absoluta.
Esa soledad que se adueña de todo lo que fue, lo que existe y lo que vendrá.


Pero cómo podría describir esta palabra tan deseada muchas veces y tan impuesta, otras. El caso es que tiene nombre de mujer, es necesaria de vez en cuando, pero es a la vez temida por todos cuando nos vemos sometidos a ella.
 
Y qué entendemos por soledad, ¿se puede decir que a pesar de vivir en una sociedad tan amplia, cada día más unida al progreso, en la que las distancias están superadas por las nuevas tecnologías, que estamos realmente solos?. Sí, porque hay una soledad externa y otra interna, que quizá es la verdadera soledad. Si el hombre es social por naturaleza, por qué nos cuesta tanto sentirnos parte de un todo. Estamos rodeados de compañía y seguimos sintiéndonos solos. Sin embargo necesitamos de ella como válvula de escape de nuestros estados ansiosos y aunque sea muy importante sentirse queridos y encontrar de vez en cuando un punto de apoyo en los demás, es bueno que el hombre esté solo, que temple su estado de ánimo y relaje su espíritu.




Cuando el sonido se rompe y el mundo se calla, nos duele el dolor sordo de la ausencia. La soledad es amarga y dulce a la vez, se bebe en vaso largo y hasta se saborea.. Cuántas veces en esa ausencia acunamos sueños imposibles que nunca llegan... Lo que tengo claro es que la soledad es la única que nos entiende y nunca jamás cuestionará todo aquello que pensemos.


La noche tiene el encanto de la quietud más pacífica y relajante. Mientras el sueño intenta adormecer mis pensamientos, yo trato de sumergirme en las sombras más profundas. El día tiene demasiadas horas estresantes, demasiados minutos agobiantes y por ello necesito vivir la noche con el único fin de dejar la mente libre de tensiones, preocupaciones y ajetreos. Intento sobre todo apartar mis obsesiones, fantasmas que me tienen presa desde hace ya mucho tiempo y que mi exterior nunca muestra, jamás lo ha mostrado porque procuro rechazar los pensamientos que me agobian para no transmitirlos a los que me rodean, ellos no lo entenderían jamás. Por ello aprovecho los momentos de soledad, mi soledad, son beneficiosos y me aferro a ella pensando que no hay soledad triste si de verdad lo deseas. Me suelo preguntar cuánto tiempo tiene que pasar para que una mente llegue a recuperar la estabilidad que necesita. Antes al oír aquella voz, mi alma se llenaba de energía, ahora ya la voz, su dulce voz, quedó anclada entre sonidos sordos, vagando en el aire.
En mis noches solitarias suelo recordar aquellas palabras de aliento que ahora echo tanto de menos.
Eran palabras llenas del calor de una madre.


El silencio no tiene rostro, la soledad lo dibuja recordando. Ni tiene colores, la soledad lo pinta de gris y de sombras.
El silencio no tiene pentagramas, la soledad es toda una sinfonía de lamentos. El silencio tiene un cuerpo frágil, la soledad lo acaricia noche a noche. El silencio canta en verano y primavera, la soledad llora en otoño y en invierno.
 




27 comentarios:

  1. Anónimo5/3/17

    Un placer volver a leerte, la paz de noche con su silencio y soledad, invita al pensamiento y sentimiento profundo.
    Pero el pacífico día nos regala el color y aroma de la vida.

    Agradezco el cariño, la ternura y el sustento, que dispensas a mi alma mientras me ausento.
    Voy despacio, pero poco a poco iré pasando y saludando.
    GRACIAS, por tenerme en tu recuerdo.

    Desde mi refugio te leo y te doy un abrazo.
    Ambar

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    1. No tienes que darme las gracias. Querida Ambar, te comprendo muy bien y sé que no puedes visitarme, poco a poco verás como tu fuerza y la propia vida te compensarán.
      Mi saludo y mil abrazos.

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  2. Aunque un día después, paso por aquí para desear a tu pareja muchas felicidades en su cumple, ya lo recordaré para posteriores años.
    Espero que lo pasárais tan bien como lo pasamos nosotros.
    Un beso fuerte para los dos.

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    1. Dos Piscis que seguro se complementan. Muchas gracias Tracy. Somos pocos pero lo celebramos a lo grande.
      Un fuerte abrazo.

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  3. Te entiendo, afortunadamente a mi la soledad siempre me hizo disfrutarla y continua haciéndolo, cada vez mas, diría yo...
    Besos y salud

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    1. Ya lo sé que me entiendes, tú estás acostumbrado a ella y seguro que cuando te falta mucho tiempo la echas de menos.
      La necesito, Genio, hay días que estoy cansada, necesito tranquilidad y estar relajada.
      Un abrazo azul para ti como siempre.

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  4. Tu escrito es acompasado con un ritmo muy especial, que le da mucha calidez y va fluyendo muy natural y sutil, que llega muy profundo, escuchando tu voz narrativa. La soledad es muy necesaria para serenarnos, entender, ponernos en paz, para reflexionar, y hacer ese proceso que tu has hecho con respecto a lo que sientes, para liberarte de angustia y presión y luego dwspues soñar. Te quedó espléndido.
    Muchos besitos azules, como estrellitas junto a ti.
    * te dejó una entrada, por si te apetece leerla, sobre el tema:
    https://saboranisestrella.blogspot.mx/2015/11/senorita-soledad.html?m=1

    (Disculpa que no sé cómo insertarte activo el enlace)

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    1. Leeré esa entrada, seguro y gracias por el detalle.
      Mi soledad es a veces necesaria, pero también me lleva a recordar y como consecuencia a la tristeza. Es duro estar solo, pero lo es más estar con gente que no te escucha, que te ignora.
      Abrazos miles para ti, querida amiga.

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  5. El vacío que deja una madre no puede llenarlo nada. Un beso.

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    1. Esa es la soledad más dura y más cruel que existe.
      Un abrazo.

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  6. Hermosa y emotiva entrada, la soledad cuando es profunda no nos deja ver la luz, que somos. Cuando nos invade la soledad, todo es inútil, es como un pincel estático, sin deseos, sin nada, es como un paisaje desolador, es el congelamiento de la emoción. Airblue, esos recuerdos siempre estarán ahí. Porque todo lo que guardamos en el corazón con amor no se olvida, pues el único lugar donde todo esta presente, y regresamos una y otra vez, porque es ahí donde todo los recuerdo se reúnen.
    Un abrazo de amor y luz.

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    1. Tienes razón, todo lo que tenemos dentro forma parte de nosotros y la soledad se busca para reencontrarnos con los recuerdos y momentos felices. A veces es necesario.
      Gracias Cristina y un abrazo.

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  7. En la vida hay momentos para todo, unos para la soledad y otros para la compañía. Cada persona es un mundo, unos se sienten cómodos estando en soledad y otros la detestan.
    También creo que la soledad impuesta, sobre todo a las personas mayores no es buena consejera.
    Saludos.

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    1. La soledad del anciano es una de las más duras, generalmente suele ser impuesta y es sinónimo de dolor y crueldad.
      Prefiero no recodar lo que hace muy poco he visto y vivido a diario.
      Un abrazo.

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  8. La soledad como el dolor es aquella mala compañera de viaje con la que hay que aprender a convivir. Y siendo dura tiene su lado positivo. Quien la padece, también sabe apreciar mejor la compañía.

    Feliz semana

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    1. Y tienes razón, pero es duro cuando es impuesta y no se acepta. Ya pasó, pero créeme que lo he vivido hace muy poco y se te desgarra el corazón.
      Un abrazo Luismi.

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  9. Hola paso hacerte una visita me encanta tu relato es tierno y precioso pero triste por que la soledad impuesta es triste pero hay que seguir por la senda de la vida. Saludos

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    1. Gracias por venir a visitarme, con vosotros la soledad no existe.
      Un abrazo.

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  10. Creo que muchas veces la soledad es terrible.

    La soledad que deja la ausencia de un ser querido, es muy dolorosa.

    Un fuerte abrazo.

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    1. Esa soledad es tremendamente dolorosa, una pérdida irrecuperable que solo el paso del tiempo pude ir paliando, pero nunca se olvida ni hay nadie que la sustituya.
      Es una soledad por la que todos pasamos.
      Un abrazo.

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  11. Querida Airblue, permíteme una puntualización sobre la soledad. La soledad es...
    La Sole es una profesora de matemáticas que tenían mis hijos en el "tuto". Los traía por la calle de la amargura. Mi mujer cada vez que se acuerda de ella se acuerda tambien de sus antepasados.
    Bueno, es otro tipo de soledad y no tiene nada que ver pero cuando me ponga al día con las entradas tendré comentarios mas inteligentes, creo.
    Un abrazo y me tienes por aquí de nuevo.

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    1. Ja,ja,ja, eres tremendo, ni se me había ocurrido pensar en esa clase de Soledad. Yo también conozco a una que más vale olvidarla.
      Bienvenido de nuevo y que dure tu estancia por la red.

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    2. Naranjito: No puedo entrar en tu blog, ya me ha pasado alguna vez.

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  12. Que bonito, como acompañan tus palabras, me quedo en silencio, dejo descansar a Raphael y leo con calma , me detengo y pienso. Me gusta la soledad, no esa soledad de cuatro en la mesa cada uno con su móvil, no, a mi me gusta mi soledad, donde añorar no duele, donde los recuerdos brillan. Precioso texto que no me he perdido por tu toque de atención, al ver que lo habías publicado en domingo y ese día no entro en el blog. he pensado que por eso se me había pasado por alto, pero he buscado y no, tu entrada no me aparece. Voy a volver a seguirte y si a la próxima ves que no llego dame un tirón de orejas para que siga buscando soluciones. Abrazos de colores

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    1. Algo pasa y es que la verdad, tus comentarios son fundamentales en este blog. Los echo de menos.
      Tu soledad es parecida a la mía, necesaria la mayoría de las veces.
      Gracias y un abrazo.

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  13. Muy buena entrada mi querida amiga.
    Siento no haber dado señales de vida antes, pero debo de ir con mucho cuidado en estar sentada o de pie, aunque he quedado bien de la primera intervención, hay que retocarla y me espera la otra pierna, así que este ordenador casi no lo abro, sé que me engancharía sin darme cuenta.
    Te dejo un gran beso de ternura sin soledad.

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  14. Yo no sabía de soledades hasta que...
    Rodeada de una familia grande, nunca he tenido tiempo para mí, las horas del día se me hacían cortas para tener todo a punto y, aún así, he sido feliz.
    Nunca me ha gustado estar sola, debe ser porque siempre he tenido gente a mi alrededor y me he acostumbrado a ello pero, he de reconocer, que siempre se agradece un momento tranquilo para pararse a mirar el espejo de nuestro interior, a mirarse por dentro y a tratar de conocerse un poco más.
    Cuando la soledad se busca, se agradece.
    Cuando la soledad te la imponen...
    La vida y las costumbres de las gentes, ha cambiado muchísimo y no en tantos años, no me digas cuál es la razón, pero el caso que he observado que hasta hay personas que les cuesta un montón devolver un saludo o darte los buenos días, cada vez nos volvemos más introvertidos.
    Te dejo un fuerte abrazo.
    Kasioles

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