Despierta ya árbol, deja de apoyar tus ramas cansadas en mi ventana, ya no es necesario protegerse del viento ni de la nieve, pronto te librarás del aliento de Eolo y dejarás el manto de hojarasca con el que te estás abrigando. Fíjate como las nubes corren a esconderse y hasta los tejados se quedan sin el fino encaje que llevan luciendo todo el invierno. Nada detiene al tiempo, en este abismo lleno de cosas nada se queda, ni se despide siquiera para decir adiós. Ahora hay que vestirse de primavera, ya ha llamado a la puerta mientras el frío se va de puntillas.
Inevitables recuerdos se acercan como siempre y el corazón me pide que escriba.
A punto de llegar la nueva estación, en una ciudad con fama de fría, donde puedes oír si lo deseas el ruido de los cascos de Bavieca y donde la primavera es más bien un invierno suave, mi pensamiento vuelve a ver a la niña con trenzas caminando de la mano de su padre, los domingos por la mañana. Sí, es la misma que corría al puesto de los barquillos, aquel que todos recordamos girando redondo y rojo y que podías encontrar en cualquier esquina del paseo o del parque. Unos con forma de tubo tostaditos y otros, unas obleas redondas y grandes que casi tapaban la cara y el concurrido quiosco de Avelino con el último número del TBO o del almanaque, más grueso y más caro. Tampoco falta la señora del pañuelo negro, con la cesta llena de chucherías, barritas de paloluz, pipas, bastones de fresa, paragüas de chocolate... mmm ¡qué ricos!. Vendían también unas manzanas bañadas en caramelo, que no eran mis preferidas, pero su color rojo brillante alegraba la vista y daba gusto verlas pinchadas en abanico.
Esta primavera es especial y nos ha tocado vivirla.El color morado de los lirios nos recordará la Semana Santa. Las buganvillas y jacarandas nos llevarán a la feria de Sevilla, gitanillas y geranios a los patios cordobeses, el rojo clavel a San Isidro y las lilas y glicinias colgarán de las paredes.
Despierta ya arbolillo, enjuto y seco por las inclemencias del tiempo, despierta en esta España solitaria, en el silencio de sus calles, donde solo se oye fluir el agua de las fuentes. Despierta del letargo que en tus ramas ya brillan como esmeraldas, pequeños brotes de vida.
De nuevo todo renace, brota como ese cielo dormido, aquello que desde niños ya perdimos, nuestra inocencia, nuestro dolor, nuestras lágrimas, pero con mensajes salidos de un alma noble, sólo se puede vibrar, volver a nacer y como premio reír.
Airblue
Basado en una entrada publicada el 19/ 3/2018
me encanto ese recuerdo de niña con tu papa. Es que somos esas cosas, somos lo recuerdos... saludos y feliz primavera dentro de lo que vivimos...
ResponderEliminarUna primavera especial pero que nos recuerda, por el silencio, esas de la infancia, que no volverán.
ResponderEliminarPrecioso post
Empiezas con poesía ordenada en prosa y nos conduces flor a flor a todas las fiestas de la primavera, la veremos a través de los cristales, tambien en la pantalla del ordenador pero nuestra imaginación nos dejará sentir su aroma y nuestro carácter abierto nos invita a soñar. Ningún virus ningun gobierno nos puede quitar los sueños. Muchos estan en tu entrada solo hay que leer con el pensamiento puesto en el pasado y la esperanza en el futuro. Un abrazo enorme
ResponderEliminarPrecioso, lleno de vida.
ResponderEliminarBesos.
Me encanta cómo escribes. Un beso
ResponderEliminarGracias por hacerme recordar mi ya lejanisima niñez. Con menos cosas en el puesto del "paloduz" y únicos helados de hielo raspado con unas gotas de jarabe de fresa en el puesto de la Sabina, que en la posguerra faltaba casi de todo.
ResponderEliminarA pesar de todo, aquellas primaveras iniciáticas, siempre las recordaré con cariño.
En esta que ahora empieza, me han robado el aire, el sol, la libertad y los sueños.
Esperemos que sea por poco tiempo.
Besos.
Siendo positivo (nunca negativo como diría aquel ínclito entrenador de furbo) estamos devolviendole a la Naturaleza algo de nuestra deuda con ella. Aguas limpias, aire una mijilla más puro, pájaros revoloteando a sus anchas, y miles de cosas más.
ResponderEliminarA ver cuando podemos darnos un paseito por los parques y disfrutar de lo que hace años disfrutamos.
Tus letras me han emocionado mucho. Me han traído un montón de recuerdos.
ResponderEliminarAquellos tiempos tan felices que no volverán...
Bello tu escrito.
Un abrazo con todo cariño.
Si se han llenado de esas yemitas verde joven como yo digo.
ResponderEliminarEs como una premonición.
Volveremos a tomar la sombra bajo sus ramas.
Beso
Y cómo vamos a abrazar a ese árbol, a esa primavera en cuanto podamos mirarla sin ansia ni tristeza...
ResponderEliminarBss
De recuerdos me llenas con este recorrido por aquellos tiempos en los que tan niñas(tan tiernas)gozábamos de las cosas sencillas ,como la manzana de caramelo..
ResponderEliminarY ese árbol va a brotar!Los pajarillos están ahí esperándonos.YO creo que nos echan en falta.
Volveremos,amiguca ,aunque me caiga en ocasiones,otras me hago fuerte y digo que SALDREMOS DE ESTA!
QUién nos lo iba a decir..
Besucos preciosa.Escribes tan bonito...
Gó
La primavera llegó con todos sus recursos. Los árboles sonrientes, ya acogen cientos de aves. Nos dice la primavera, aquí estoy lista para volver a abrazarte cuando puedas salir.
ResponderEliminarDe mí hacia ti... Un abrazo descomunal y mucho cariño. ¡Gracias! En estos sucesos es cuando conocemos de verdad la humanidad de las personas. Así ya consideraba que eras. Hoy lo confirmo y eso me emociona. Porque a veces uno se lleva las grandes decepciones.
Tu sonrisa limpia mis lágrimas. Espero poder volver a sonreír pronto. Porque la alegría es motor. De momento lo tengo apagado.
Millones de gracias por tu generosidad.
ResponderEliminarEspero que todo vaya muy bien.
Nosotros, de momento , vamos resistiendo.
Un abrazo con mucho cariño.
Hola querida amiga.
ResponderEliminarVine a ver cómo estabas, me alegra que sigas escribiendo y que estés bien. Cuídate.
Te mando un abrazo.
El blog que tengo abierto es el primero, el que lleva mi nombre.
lujanfraix.blogspot.com
Cariños
Hola preciosa tu escrito me encanta, cuando todo esto pase creo que abrazaremos a todo y a tod@s Saludos
ResponderEliminarMe has traído recuerdos de mi infancia con ese puesto de chucherías. Hoy tenemos una primavera rara que la vivimos con tristeza. Cuídate Airblue.
ResponderEliminarAbrazos.
Que encanto de palavras.
ResponderEliminarMuchas gracias a todos los que pasáis por mi espacio. Si vosotros este blog, no tendría sentido.
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